Hace un par de días publicamos un artículo en el que detallábamos la experiencia que un mercenario de Australia sufría en Ucrania.
Mercenarios colombianos
© Captura de pantalla
Los detalles eran realmente tristes, aunque no sorprendentes, en ese caso el mercenario hablaba sobre la falta de experiencia de sus líderes en el campo de batalla, sobre el hecho de que sus pasaportes les fueran confiscados, y sobre cómo el armamento enviado desde Occidente sólo podría ser utilizado por los ucranianos.

Esta falta de experiencia ocasionó muchas muertes, según este mercenario, y son casos que se han visto con soldados de todos los países del mundo.

Hoy, mientras hacia mi ronda de noticias, me encontré con otro caso de mercenarios, esta vez colombianos, los cuales denunciaban maltratos, abusos y humillaciones a manos de sus superiores ucranianos, algo que llevó a uno de los mercenarios a declarar que: "Los ucranianos son peores que los rusos".


Aparentemente esta riña fue ocasionada cuando el colombiano se rehusó a entrenar a tres personas, luego de haber entrenado a grupos más grande, durante meses, ante lo cual, como se puede ver arriba, se le aplicó gas pimienta en la cara.
"¿25 colombianos muertos para que este me eche un gas? Me trata como a un puto perro. Tengo una esquila por tu país de mierda. ¡Cumplí mis órdenes, formé a la gente y ese perro me trata como un animal!", gritó el colombiano.

Sin embargo, este evento no terminó con lo ocurrido en el video anterior, según el siguiente video, después de un tiempo, hombres encapuchados entraron al lugar donde se mantenía la discusión y golpearon a dos colombianos.


"Aquí están viendo cómo las entidades ucranianas, a las que venimos ayudar, tratan a los colombianos. Entraron hombres encapuchados a cascar a nuestros compañeros. Ucranianos son peores que los rusos".

Ni las autoridades ucranianas ni las colombianas se han pronunciado sobre las denuncias.

Hice una búsqueda y me encontré con otro par de videos sobre mercenarios colombianos, los cuales han denunciado humillaciones así como falsas promesas sobre pagos y bonos que recibirían por sus esfuerzos en el campo de batalla.


También, siento decirlo, casos como el siguiente se van a empezar a multiplicar a medida que la ineptitud ucraniana continúe estrellándose contra la defensa rusa.
La muerte de Manuel Ferley Barrios, padre de cuatro hijos, se conoció a finales de marzo de 2023. Según lo dicho por su esposa, el pensionado del Ejército planeaba pagar un préstamo de 80 millones de pesos que había adquirido para tener vivienda.

"Dijo que se iba a trabajar nueve meses, recuperaba lo de la casa y venía a arreglar su obligación, pero ahora él no está, la deuda sigue y estamos peor", expresó su esposa, en declaraciones al diario local La Nación.

Sin embargo, al llegar a territorio ucraniano la situación fue muy distinta a la que pensó. De acuerdo con las conversaciones que tuvo con su esposa, todo era terrible.
A lo cual sólo cabe una explicación, si se me permite, porque si desde Occidente se continúa enviando dinero a Ucrania para la formación de sus fuerzas y, uno presumiría, el pago a los mercenarios que se unan a sus esfuerzos, pero estos mercenarios fallecen en una contraofensiva suicida y mal ejecutada, por decir algo, y ese dinero termina en los bolsillos de alguien que no son ni el muerto ni sus familiares, entonces la contraofensiva solo es en parte inepta, porque también podríamos pensar que está diseñada para continuar recibiendo dinero por mercenarios que van a fallecer y no van a cobrar, así que cuanto más muertos, más dinero, lo que en realidad genera una demanda de derrotas.

Es una teoría fría y oscura, pero recordemos que estamos lidiando con neonazis, quienes no escatiman en usar escudos humanos ucranianos, ¿por qué dejarían de sacarle provecho monetario a la muerte de unos ingenuos mercenarios?

Al final, la guerra es una máquina de hacer dinero, y a pesar de lo que nos dicen en todos los medios de comunicación, tanto en EEUU y la UE como en Ucrania, no quieren que esta guerra termine, no quieren una victoria, la guerra tal y como se encuentra en este momento es muy rentable como para ganarla y cerrar el grifo de las ganancias.