RTmie, 27 dic 2017 19:29 UTC
La fortuna de las personas más adineradas del planeta creció en 2.700 millones por día y terminará el 2017 con un impresionante crecimiento equivalente a un billón (o un millón de millones) de dólares, informaBloomberg.
© InternetEventualmente la copa será tan grande que aplastará a las de abajo...
Se trata de un incremento interanual del 23 % en el
índice de milmillonarios elaborado por la compañía estadounidense, el cual incluye a las 500 personas más acaudaladas del mundo.
Este aumento en el patrimonio personal de los individuos más ricos viene acompañado por un incremento de casi 20 % en el mercado internacional de valores, reflejado tanto en el índice mundial de capitales de Morgan Stanley (MSCI World Index), como en el Índice Standard & Poor's 500.
El que más ha incrementado su fortuna en el transcurso de este año es Jeff Bezos, el fundador de
Amazon.com, quien obtuvo una ganancia de 32.000 millones de dólares. De este modo, con una riqueza neta de 99.600 millones dólares, Bezos ha destronado a Bill Gates, cofundador de Microsoft, quien actualmente posee 'apenas' 91.300 millones de dólares.
Además, este año ganaron protagonismo los milmillonarios chinos. Los 38 representantes del gigante asiático en el índice de Bloomberg han ganado 177.000 millones de dólares, logrando así un incremento anual del 65 %, el porcentaje más grande de todos los países presentes en la lista. En particular, la segunda persona que más ha incrementado su fortuna en el mundo fue Hui Ka Yan, el fundador de Evergrande Group, una compañía de la industria inmobiliaria.
En promedio, este selecto grupo de los principales milmillonarios del planeta aumentó su patrimonio en 2.700 millones de dólares por día y, según los datos de este 26 de diciembre, controlaban una fortuna total de 5,3 billones de dólares, comparada con los 4,4 billones de hace exactamente un año.
Comentario: No permita que lo impúdico de estas cifras lo alarmen o despierten su deseo de convertirse en un Robin Hood del siglo XXI. Hay que tratar de ver todo esto en perspectiva. La horripilante distribución de la riqueza en el mundo que habitamos no es la causa de todo el mal que nos rodea, sino más bien uno de los síntomas. Así que antes de caer en la trillada trampa del antagonismo ideológico entre socialismo vs capitalismo (aunque sus intenciones sean buenas), piénselo, ese es un callejón sin salida y equivaldría a querer curar un cáncer cerebral con aspirinas.
Lo que parecería estar más cercano a las causas del problema, es nuestra condición como seres humanos. Vivimos "dormidos", y mientras dormimos soñamos que estamos despiertos. Goethe lo puso en estos términos: "
Nadie está más esclavizado que aquellos que falsamente creen ser libres".
Estas imágenes alegóricas parecen describir con precisión el estado en el que el hombre transita su vida, una especie de letargo que lo hace incapaz de comprender cabalmente la Realidad y conectar profundamente con el resto de los individuos.
A veces el mundo que habitamos parece estar diseñado para mantenernos en este estado de apatía y sopor.
Lo urgente no nos permite tomar consciencia de lo verdaderamente importante, infinidad de tentadoras distracciones surgen a nuestro paso cada vez que intentamos asomarnos a esa elusiva Realidad, y si eventualmente sorteamos estas trampas, un arsenal de causas perdidas se nos presentan como
LA alternativa para "curar" al mundo.
Durante miles de años hemos intentado resolver nuestros males transitando esta senda y esencialmente nada parece haber cambiado (de hecho a veces todo parece haber empeorado).
Es hora de que nos enfoquemos en este "problema" de un modo completamente nuevo. Es hora de comprender que, como dijo Mahatma Gandhi "
tenemos que SER el cambio que queremos ver en el mundo".
Ese parece ser el principio de la madeja; "
Conócete a ti mismo" era el mensaje de bienvenida al entrar al templo de Apolo en Delfos. Esta frase cliché en realidad encierra un significado profundo, una invitación a una aventura que posiblemente durará toda la vida (o más)... ¿Por dónde empezar entonces?... Pues por el principio:
Comentario: No permita que lo impúdico de estas cifras lo alarmen o despierten su deseo de convertirse en un Robin Hood del siglo XXI. Hay que tratar de ver todo esto en perspectiva. La horripilante distribución de la riqueza en el mundo que habitamos no es la causa de todo el mal que nos rodea, sino más bien uno de los síntomas. Así que antes de caer en la trillada trampa del antagonismo ideológico entre socialismo vs capitalismo (aunque sus intenciones sean buenas), piénselo, ese es un callejón sin salida y equivaldría a querer curar un cáncer cerebral con aspirinas.
Lo que parecería estar más cercano a las causas del problema, es nuestra condición como seres humanos. Vivimos "dormidos", y mientras dormimos soñamos que estamos despiertos. Goethe lo puso en estos términos: "Nadie está más esclavizado que aquellos que falsamente creen ser libres".
Estas imágenes alegóricas parecen describir con precisión el estado en el que el hombre transita su vida, una especie de letargo que lo hace incapaz de comprender cabalmente la Realidad y conectar profundamente con el resto de los individuos.
A veces el mundo que habitamos parece estar diseñado para mantenernos en este estado de apatía y sopor. Lo urgente no nos permite tomar consciencia de lo verdaderamente importante, infinidad de tentadoras distracciones surgen a nuestro paso cada vez que intentamos asomarnos a esa elusiva Realidad, y si eventualmente sorteamos estas trampas, un arsenal de causas perdidas se nos presentan como LA alternativa para "curar" al mundo.
Durante miles de años hemos intentado resolver nuestros males transitando esta senda y esencialmente nada parece haber cambiado (de hecho a veces todo parece haber empeorado). Es hora de que nos enfoquemos en este "problema" de un modo completamente nuevo. Es hora de comprender que, como dijo Mahatma Gandhi "tenemos que SER el cambio que queremos ver en el mundo".
Ese parece ser el principio de la madeja; "Conócete a ti mismo" era el mensaje de bienvenida al entrar al templo de Apolo en Delfos. Esta frase cliché en realidad encierra un significado profundo, una invitación a una aventura que posiblemente durará toda la vida (o más)... ¿Por dónde empezar entonces?... Pues por el principio: