El encuentro entre ambos funcionarios se llevó a cabo en Bogotá en el marco de una visita oficial que realizó Mánturov a Colombia junto a 23 empresarios rusos de sectores como energía, aviación, férreo y farmacéutico, y en el que evaluaron temas de la agenda común relacionados con transporte, agroindustria, industria química, farmacéutica y de salud.
"Colombia es un socio importante de Rusia en América Latina, vemos un potencial para hacer crecer la cooperación en numerosos aspectos mutuamente ventajosos en nuestros países; justamente es la industria la que ha de ser la locomotora de este proceso", señaló por su parte Mánturov en un comunicado.
Durante la reunión Gutiérrez le explicó a la delegación rusa la política industrial y comercial de Colombia, que busca fortalecer la productividad y la competitividad y aumentar la oferta exportable, dentro de la cual hay potencialidades para productos agropecuarios como aguacate hass, cacao, cítricos, café, banano, flores y carne bovina, entre otros.
"Esa clase de productos no los producimos en nuestro país, los adquirimos en el exterior y podríamos comprarlos a Colombia o aumentar la participación que ya tenga en esos mercados", dijo Mánturov ante la iniciativa, precisó el Ministerio de Industria y Comercio de Colombia.
Por otro lado, durante la reunión ambos gobiernos acordaron fijar una agenda de trabajo para lograr el restablecimiento de las exportaciones de carne bovina colombiana a Rusia, luego de que Colombia perdió la certificación de país libre de aftosa por un brote reciente que se presentó pero que ya superó.
Antes de ese brote y de que el Gobierno Federal Ruso aplicara las respectivas suspensiones, Rusia era el principal comprador de carne bovina colombiana en el mundo, con cerca de 4.000 toneladas por año.
Por último, en materia de inversión extranjera, Gutiérrez invitó a las empresas rusas a invertir en Colombia que, según indicó, por su posición geográfica es la puerta de entrada a América Latina.
La visita de Mánturov a Colombia forma parte de una gira comercial que llevó a cabo el ministro ruso por algunos países de América Latina y que lo llevó también a México y Paraguay.
Comentario: El nuevo paradigma económico basado en la cooperación y el beneficio mutuo impulsado por el eje asiático parece estar echando raíces por todo el mundo, y por supuesto, amenaza la hegemonía estadounidense, completamente opuesta, basada en la dominación y la injerencia. Ahora podemos preguntarnos, ¿se quedará con los brazos cruzados el Estado Profundo?
EEUU tiene dos opciones, o renunciar a la imposición global de su hegemonía unipolar basada en la guerra y en una moneda artificialmente inflada, o integrarse a un nuevo paradigma económico multipolar basado en la cooperación, hasta ahora, impulsado por el eje asiático. Pero resulta bastante complicado visualizar a EEUU dejando a un lado los cimientos económicos que han sostenido a la patocracia en el poder hasta ahora, y que pase a considerar otras alternativas menos injerencistas y destructivas poco acordes con la visión patológica de los que detentan el poder en EEUU.