El presidente de la Comisión Europea comparece ante el Parlamento de Estrasburgo, aunque deberá continuar en funciones un mes más de lo previsto.
El Globalista Juncker llama en su despedida a combatir «los nacionalismos estúpidos»
© ReutersJean-Claude Juncker, durante su discurso de despedida ante el Parlamento Europeo
El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, compareció este martes ante el Parlamento Europeo para dar cuenta de sus cinco años de mandato, que concluyen el próximo 1 de noviembre. No es la primera vez que lo menciona, pero en su despedida el luxemburgués quiso ser especialmente explícito en la condena contra «los nacionalismos estúpidos y estrechos de miras» a los que considera como los enemigos de Europa.

Teóricamente, hoy debía haber sido su última comparecencia ante el Parlamento, aunque el retraso en la formación de la nueva Comisión le va a obligar a seguir al menos un mes más en funciones. Pero eso no impidió que lanzara un mensaje clarísimo para sus sucesores, empezando por la próxima presidenta de la Comisión, la alemana Ursula von der Leyen, y los futuros comisarios: «Cuidad de Europa -les dijo- y combatid con todas vuestras fuerzas los nacionalismos estúpidos y cerrados de miras. ¡Viva Europa!».

Las posiciones de Juncker sobre el nacionalismo son bien conocidas. En otras ocasiones lo ha calificado como «miope» o como una «mentira evidente y un veneno pernicioso». Naturalmente, el presidente de la Comisión se refería sobre todo a las fuerzas populistas que están ganando posiciones en casi todos los países miembros, lo que incluye a los regionalismos separatistas que jamás ha amparado.

Desde que tomó posesión del cargo hace cinco años, Juncker nunca ha tenido un gesto que pudiera ser interpretado como una señal de simpatía o apoyo al independententismo.

«Orgulloso de servir a Europa»

El luxemburgués ha cumplido 64 años, pero en los últimos meses se le ha visto debilitado por sus dolores lumbares y además no puede ocultar que necesita un merecido descanso. En su despedida ante los periodistas en el último Consejo Europeo dijo que «hasta el último momento de mi vida estaré orgulloso de haber tenido el privilegio de servir a Europa».