¿Masturbar flores? ¿Tener relaciones con arboles? Suena demasiado extraño, pero es real. Se trata de la eco sexualidad o sexo ecológico, un colectivo que hace el amor con la madre tierra.
La idea es establecer diversas conexiones sensoriales, desde lo puramente mental o espiritual hasta relaciones físicas
El objetivo no es sólo probar una experiencia diferente, sino que salvar el mundo. La agrupación busca que las personas consideren sensual y atractiva la naturaleza. Para así generar conciencia sobre el cuidado de nuestro planeta y su ecosistema.
Si bien es cierto que este movimiento no es muy conocido, la compañía de teatro australiana Pony Express, se ha encargado de hacer publicidad con su Eco Sexual Bath House o casa de baños ecosexual, donde la gente puede realizar sus interacciones.