Apagón
© DANIEL GARCIA/AFP/Getty ImagesApagon en Buenos Aires, Argentina el 7 de noviembre de 2012.
Un masivo apagón de luz se registró en vastas zonas de Buenos Aires cuando la capital registraba temperaturas de más de 30 grados, informó el medio local Uno.

Un accidente en la red de alta tensión afectó a 18 subestaciones eléctricas, lo que derivó en un corte generalizado de energía en la Capital Federal.

Se inició pasadas las 18 horas y se mantuvo en el lapso de mayor tránsito causando caos en las calles cuando dejaron de funcionar los semáforos, por lo que el Ministerio de Seguridad de la Nación puso en marcha un operativo especial a cargo de la policía federal, informó Uno.

El servicio interrumpió la electricidad a cerca de 450 mil usuarios, equivalentes a más de un millón de personas, según el reporte de La Nación. A las 21 horas comenzó a normalizarse en algunos sectores.

Entre los barrios afectados Once, San Cristóbal, Balvanera, Devoto y Villa Crespo, San Telmo, Villa del Parque, Belgrano, Colegiales, y Palermo

Según fuentes de Edesur, proveedores de la energía, el motivo del apagón fue "una doble falla en dos líneas de alta tensión de la red Costanera-Bosques, que hicieron salir de servicio a 12 subestaciones, por causas que se investigan", citó La Nación.

Entre los grandes afectados estaban la Casa Rosada, los Tribunales Federales de Comodoro Py, el Congreso y la Legislatura, informó Visión Federal.

Los ex secretarios de Energía de la Nación, Emilio Apud y Alieto Guadagni, evaluaron como "preocupante" la situación del sector en el país. Advirtieron que la falta de recursos deja a la red cada vez más obsoleta, agregó Visión Federal.

Para Apud la situación se veía venir hace mucho tiempo. "Hasta hace cinco años, las fallas podían direccionarse", dijo.

"De ese modo, cuando ocurría algún problema los hogares no se veían afectados, porque se podía orientar en qué lugar suspender el suministro. Ahora, dijo, la situación cambió y ya no es posible mantener ese direccionamiento", agregó el ex secretario.

En tanto, Guadagni denunció que "la situación es caótica", explicando que "las concesionarias han invertido por debajo de lo requerido y el Gobierno consintió esa falta de inversión".

El medio argentino Clarín destaca que las empresas energéticas están casi en quiebra. Las tarifas de electricidad están congeladas desde hace más de una década y solo 40% de las facturas mensuales se están cobrando, lo que afecta a unas 20 distribuidoras y cooperativas, con cuantiosas pérdidas mensuales que se están sumando.

En el portal de Edesur, una de las proveedoras relacionadas, reporta en su último comunicado de prensa que la empresa registró al 10 de agosto un pérdida neta de 279,5 millones de dólares en el primer trimestre de 2012.

Otras empresas relacionadas, como Edelap, Edemsa, Santa fe, Córdoba y San Luis se encuentran adeudadas en sus pagos.