Aparentemente dormido, más bajo que la mayoría de cerros que lo rodean y encima cubierto completamente de vegetación, a simple vista no hay mucho que explique por qué hasta hace unos días El Escondido era el volcán del que todos estaban hablando.
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© Servicio Geológico colombianoEl Escondido: un volcán oculto a plena vista durante al menos 30.000 años en el departamento colombiano de Caldas.
Pero la clave está en el nombre: escondido ante los ojos de todos hasta hace alguna semanas, su reciente identificación por un grupo de geólogos colombianos en cierta forma lo convierte en el más joven de los volcanes del país.

Aunque su edad se estima en al menos 30.000 años.
"Se descubrió un volcán en el oriente del departamento de Caldas, pero es importante aclarar que no es un volcán que salió en estos días", le dijo a BBC Mundo Gloria Cortés, coordinadora del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Manizales.
"Lo que pasa es que a veces, entre erupción y erupción, pasan miles de años. Y con tanto tiempo de reposo los volcanes tienen tiempo de cubrirse totalmente de vegetación, por lo que no es fácil identificarlos", explicó Cortés.
Además, según la geóloga, la violencia de las erupciones hace que muchos volcanes prácticamente se autodestruyan, "y pierden parte de su edificio hasta la próxima explosión, por lo que a menudo tampoco son muy altos".

Los geólogos creen que una de las primeras erupciones de El Escondido se produjo hace aproximadamente 30.000 años.

Y El Escondido también había permanecido así, mimetizado en el paisaje, porque durante mucho tiempo el conflicto armado complicaba el acceso a la zona en la que se encuentra ubicado, en el centro occidente colombiano.

Por accidente

Con la zona ya en calma, sin embargo, hace un par de años el Servicio Geológico Colombiano inició estudios de cara a la posible explotación geotérmica de un volcán vecino: el San Diego.

La gente está contenta, feliz, porque eso trae turismo, Conrado Rojas, corregidor de Florencia "Uno empieza estudiando la zona cerca al volcán y se va alejando para ver hasta dónde llegan sus depósitos. Y se parte de la base que los tamaños y espesores más grandes se encuentran cerca del cráter del volcán y se van reduciendo con la distancia", explicó Cortés.
"Pero llegó un momento, como a 20 kilómetros al sur de San Diego, donde en lugar de disminuir se encontraron depósitos que claramente son volcánicos con tamaños grandísimos y espesores muy grandes".
Eso eventualmente llevó a la identificación de El Escondido, como lo bautizó la geóloga María Luisa Monsalve.

Y ahora el Servicio Geológico Colombiano está abocado a la tarea de determinar si el volcán todavía está en actividad o no, para lo que se requiere un cuidadoso monitoreo de cualquier posible actividad sísmica de la zona, cerca de donde ahora se alza el pequeño poblado de Florencia, Caldas.

¿Atracción turística?

Lejos de estar asustados con el descubrimiento, sin embargo, los habitantes de Florencia parecen haber recibido la noticia con esperanza.
"La gente está contenta, feliz, porque eso trae turismo. Y el volcán hace parte del Parque Nacional Selva de Florencia, que tiene casi 10.000 hectáreas", le dijo a BBC Mundo Conrado Rojas, el corregidor del poblado.
"Y se dieron cuenta que las partes donde ha habido actividad volcánica son demasiadamente fértiles. Con eso acaban de afianzar el conocimiento de la riqueza del suelo", agregó Rojas.
Cortés, la coordinadora del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Manizales, coincide en que, por el momento, los pobladores de Florencia no tienen nada de qué preocuparse.
"En su momento también habrá que hacer un mapa de evaluación de amenaza volcánica. Se sabe que es un volcán muy joven, presumiblemente activo y muy explosivo", le dijo a BBC Mundo.
"Pero en la vida de un volcán 10.000 años son como un segundo para nosotros", explicó la geóloga, quien no descarta que otras zonas selváticas de Colombia alberguen otros volcanes ocultos por la vegetación y por el conflicto colombiano, esperando ser descubiertos.