El abuso en estas bebidas podría dañar tu salud, tampoco hay suficientes evidencias que las avalen como energéticas.
Imagen
El consumo frecuente de altas dosis de cafeína mezclada con otros estimulantes contenidos en las bebidas energéticas puede resultar riesgoso.
Conductores somnolientos, estudiantes con exámenes en puerta y oficinistas que se fueron de fiesta, son algunos de los consumidores que esperan que las bebidas energéticas eliminen su sueño y eleven su resistencia física.

Lo que no saben es que hay limitada evidencia científica de que estas bebidas puedan cumplir con sus promesas, señala el estudio "Bebidas Energéticas y Sus Efectos en la Salud" del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).

Incluso médicos y nutriólogos recomiendan evitarlas y la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) advierte que las bebidas energéticas no deben ser consumidas por menores de edad, mujeres embarazadas, personas con padecimientos cardiacos ni deportistas.

No te dejes engañar

Jorge Salas Tirado, médico general, refiere que la necesidad de dormir no puede ser eliminada consumiendo una bebida energética. "El cuerpo tiene su propio sistema de trabajo tanto metabólico como físico y mental. Independientemente de lo que se beba, tarde o temprano, la persona terminaría por dormirse.

De acuerdo con un estudio realizado por la Profeco, la cafeína es el único ingrediente significativamente estimulante incluido en las bebidas energéticas, que, dependiendo de la marca, contienen entre una y cuatro tazas de café (46 y 322 miligramos por lata). La ingesta máxima de cafeína recomendada por la OMS es de 320 miligramos al día, y países como Estados Unidos limitan el consumo a 300 miligramos porque se ha demostrado que, cuando se excede esta cantidad, puede haber daños a la salud.

Mezcla peligrosa

Tomar bebidas energéticas mezcladas con alcohol puede provocar ansiedad, insomnio, trastornos del ritmo cardiaco e incluso intoxicación por ingesta excesiva, de acuerdo con la Cofepris. Por lo menos el 50 por ciento de los jóvenes que consumen bebidas energéticas las mezclan con alcohol, refieren los resultados de una encuesta realizada por la Profeco, y en la mayoría de los casos, la combina con vodka y whisky