Un enfriador de latas y botellas de 33 centílitros que funciona sin electricidad ni hielo y que permite enfriar la bebida hasta 20 grados centígrados en menos de diez minutos en cualquier lugar y momento. «Aisber» es el nombre de este producto innovador y ecológico, que ya está en el mercado, y que ha sido desarrollado por la joven química Paola Fatás, con la colaboración de la Universidad de Zaragoza.
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El proceso de enfriamiento en el interior de Aisber se produce de forma instantánea en el momento en el que se mezclan los componentes: principalmente urea y agua, que al disolverse alcanzan temperaturas próximas a 0 grados centígrados.

La lata o botella se coloca en el interior del enfriador, que toma forma cilíndrica. Una vez activada, la mezcla se mantiene fría alrededor de 30 minutos, evitando que la bebida se caliente durante su consumo. El producto está disponible en la página web www.aisber.com y en tiendas de deporte especializadas.

Hasta ahora nadie había utilizado la tecnología de frío instantáneo para enfriar bebidas. «Hemos desarrollado una tecnología de fabricación que permite un enfriamiento rápido y efectivo a un precio competitivo», explica Paola Fatás, Premio Extraordinario de Licenciatura en Química y doctora en Química Orgánica por la Universidad de Zaragoza desde junio de 2012.

Paola pensó en esta idea durante una ruta en bicicleta en un día caluroso:
«tenía sed y llevaba una lata de bebida pero no pude tomarla porque estaba caliente»
En ese momento, le pareció increíble que no existiera nada para enfriar una bebida en cualquier lugar y comenzó a investigar.
«Cuando terminé el doctorado, todo el mundo me decía que me marchara al extranjero para seguir investigando; pero yo decidí quedarme y poner en marcha una empresa con el objetivo de poner en valor el conocimiento disponible, que es mucho, y generar riqueza en mi Comunidad, a través del desarrollo de productos innovadores que mejoren la calidad de vida de las personas»
Asegura.

Ahora, Paola ha conseguido convertir su sueño en realidad y ha creado su propia empresa, que acaba de ser reconocida por la Universidad de Zaragoza. Para esta joven emprendedora, este reconocimiento «es una gran oportunidad tanto por el apoyo que estamos recibiendo, como por las posibilidades de colaboración en futuros desarrollos».

Así funciona el invento

Aisber está formado en su parte interna por bolsas con cavidades separadas, que contienen líquido y sales. Al presionar sobre la cavidad que contiene líquido, el sellado que separa ambas se abre, produciéndose la mezcla de componentes que activa el enfriamiento.

El proceso consiste en una disolución de distintos compuestos en agua que requiere energía. Esta energía se absorbe del exterior en forma de calor, de modo que la temperatura disminuye rápidamente. Este tipo de procesos, en los que el sistema absorbe energía del exterior, se denominan «endotérmicos» y ocurren cuando la energía del sistema final es mayor que la del sistema inicial.