La seguidilla de temblores en el norte y centro de Chile mantuvo su tónica esta semana con varios movimientos telúricos, el más reciente hace unas horas de 5,5 grados en la escala de Richter.

Aunque no hay estadísticas oficiales precisas después del terremoto de 8,4 grados del 16 de septiembre, se calculan alrededor de 740 réplicas con el vaticinio de los expertos de que continuarán varios meses más.
aardbeving earthquake
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El sismo de las últimas horas sacudió a las regiones de Coquimbo, Valparaíso y Metropolitana (donde se ubica Santiago), en el centro del país, sin reportes de daños humanos o materiales.

La Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), indicó que el temblor se sintió con una intensidad de cinco grados en la escala de Mercalli, que va del uno al doce, en Illapel y Canela.

En las ciudades de La Serena y Coquimbo alcanzó cuatro grados, al igual que en Zapallar, en la región de Valparaíso.

Del 16 de septiembre a la fecha, la misma zona se ha visto sacudida por numerosas réplicas, algunas en el entorno de grado siete y varias por encima de seis.

Afortunadamente, después de un negro balance de 15 muertos y más de 17 mil damnificados por el terremoto y tsunami, no se dieron afectaciones mayores en lo sucesivo.

El pronóstico es que irán disminuyendo las réplicas, pero pueden durar todavía hasta inicios del próximo año. La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, fijó en unos 45 millones de dólares los daños ocasionados por el fenómeno natural.