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En el Valle Alto se abrió la tierra y por debajo corre agua. En el Valle Bajo hasta un templo corre riesgo de caer y las inundaciones suman en ambas zonas de Cochabamba.

Ayer en la madrugada se abrió la tierra en la zona de Wantuyu, en Villa Rivero, a 60 kilómetros de Cochabamba. El fenómeno causó temor en los vecinos de las ocho viviendas cercanas. Son grietas, a lo largo de un kilómetro, que incluso provocaron una zanja en el camino, rajaduras en algunas paredes y especie de cráteres en medio de los sembradíos de maíz y cebada.

Al interior se escucha y se observa correr el agua y acumularse en los huecos más grandes.

"Tienen casi ocho metros de profundidad. El fenómeno se dio ya hace dos años, pero eran pequeñas rajaduras, esta vez son grietas", manifestó el asambleísta por Punata, Milton Zerna, durante la inspección realizada junto a técnicos de la Gobernación y autoridades de Villa Rivero.

Con la hipótesis de que la zona es geológicamente inestable, aguardan confirmaciones de los técnicos sobre las causas del hecho para precautelar la integridad de los pobladores.

En una zona cercana, en Aramasi, el desborde del río Paracaya afectó a 80 familias, de las cuales ocho perdieron sus casas. Ayer abrieron drenajes y zanjas en un camino para extraer el agua. Esta riada afectó antes a San Benito y Punata.

Evacuaron al menos 10 imágenes de santos del templo de más de cien años que corre el riesgo de caer en la zona de Illataco, al norte de Quillacollo. Las tormentas debilitaron la estructura de la torre lateral del templo causando derrumbes. Los adobes se remojaron y continúan deshaciéndose y cayendo como arena en la acera.

Flora Rocha, una vecina, mostró las imágenes de los santos, resguardadas en oficinas de la Organización Territorial de Base de Illataco Central.

"Hemos sacado todo porque tenemos miedo que se caiga la torre", dijo recordando que anteriormente el techo del templo también sufrió derrumbes.

La zona de Illataco quedó anegada por los desbordes del río Paucarpata. Algunas paredes de adobe cayeron y el agua sobrepasó el metro de altura.

En Vinto evacuaron a 31 familias al Centro de Sordos. Además de esos ambientes, ocupan 10 carpas en los jardines. No saben cuándo volverán a sus casas.