Traducido por el equipo de SOTT.net

El actual dzud "blanco y de hierro" en Mongolia ha alcanzado un nivel "crítico", y más del 90% del país se enfrenta a altos niveles de riesgo por este fenómeno meteorológico único, según han informado las agencias de la ONU.
Men use sticks to wade through deep snow in rural Khovd province in far-western Mongolia. (file)
© Andrew CullenUnos hombres vadean con palos la nieve profunda en la provincia rural de Khovd, en el extremo occidental de Mongolia. (archivo)
Según la Oficina del Coordinador Residente de la ONU en Mongolia, unas 190.000 familias de pastores se enfrentan a una alimentación inadecuada, precios por las nubes y una mayor vulnerabilidad.

El pastoreo y la ganadería han sido tradicionalmente parte integrante de la economía, la cultura y el modo de vida de Mongolia. Las estimaciones indican que esta temporada de invierno hay más de 64 millones de cabezas de ganado en Mongolia.

"La creciente severidad de las condiciones meteorológicas agrava aún más la crisis, subrayando la urgente necesidad de ayuda humanitaria y soluciones sostenibles para apoyar a las comunidades rurales y los medios de subsistencia tradicionales de Mongolia", declaró la Oficina en una actualización esta semana.

Es el segundo año consecutivo que el país se enfrenta a estas graves condiciones. El invierno pasado, cerca del 70% del país se vio afectado.



¿Qué son los dzuds?

Los dzuds, una peculiar catástrofe de evolución lenta exclusiva de Mongolia, son inviernos extremos caracterizados por temperaturas bajo cero, nieve copiosa y un suelo tan helado que los animales no pueden llegar a los pastos.

Estas condiciones suelen ir precedidas de un verano seco con escasez de pastos, lo que impide al ganado acumular la grasa necesaria para el invierno.

Según la Comisión Económica y Social de las Naciones Unidas para Asia y el Pacífico (CESPAP), la frecuencia e intensidad de los dzuds han ido en aumento desde 2015 debido al empeoramiento de los efectos del cambio climático y a la mala gobernanza medioambiental.

Este invierno, el doble dzud "blanco" y "de hierro" se caracteriza por una capa de nieve muy profunda que impide a los animales acceder a los pastos (dzud blanco) combinada con un breve deshielo y una posterior helada fuerte que bloquea los pastos en hielo (dzud de hierro).

Niños en peligro

Más de 258.000 personas -entre ellas más de 100.000 niños- se han visto afectadas por la obstrucción de las carreteras a causa de la intensa nevada, lo que ha impedido a los niños acceder a servicios vitales de salud, nutrición, educación y servicios sociales, según informó el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).

Las familias de pastores, que son las más directamente afectadas por el dzud, a menudo tienen que dejar a sus hijos al cuidado de parientes o en internados, lo que aumenta los riesgos de protección y causa estrés psicológico, añadió la agencia.

Entre las necesidades inmediatas para febrero y marzo figuran la financiación de programas de limpieza de carreteras, medicamentos, radios para apoyar la enseñanza a distancia y la protección de la infancia.