La altura media del oleaje durante el invierno en la costa atlántica de Europa occidental ha aumentado en las últimas siete décadas, con los mayores incrementos en las costas de Escocia e Irlanda, donde las olas han subido de promedio 0,7 metros que en 1948.
wave crash
Así lo aseguran investigadores del Centro Nacional para la Investigación Científica (CNRS, en francés) y la Univerwsidad de Burdeos (Francia), así como de la Universidad de Plymouth (Reino Unido), en un artículo publicado en la revista Geophysical Research Letters, de la Unión Geofísica Americana.

Los científicos analizaron la variabilidad internanual y la tendencia de la altura de las olas en invierno en las costas occidentales de Europa en un periodo de 69 años (de 1948 a 2017), y desde Portugal hasta Escocia.

Los resultados muestran que la altura media, la variabilidad y la periodicidad del oleaje durante el invierno aumentaron significativamente en el Atlántico nororiental en las últimas siete décadas, lo que se correlaciona principalmente con fenómenos climáticos como la Oscilación del Atlántico Norte (NAO, por sus siglas en inglés) y la Anomalía de Presión de Europa Occidental (WEPA, en inglés).

Los investigadorse indican que las condiciones climáticas extremas han llevado a las costas de Irlanda a un incremento medio de las olas de unos 25 milímetros al año en las últimas siete décadas, lo que supone un promedio de 1,7 metros en casi 70 años.

Erosión de las costas

Bruno Castelle, científico principal del CNRS, indica que la altura de las olas durante los temporales invernales es "el principal factor que afecta a la erosión de las dunas y los acantilados", y está detrás de hasta el 80% de la variabilidad costera a lo largo de las costas arenosas expuestas".

"Una mayor frecuencia de las tormentas extremas va a tener un gran impacto en miles de comunidades a lo largo de las costas atlánticas de Europa occidental. Este trabajo y nuestros otros estudios recientes han demostrado que ambos están en aumento, lo que significa que hay una necesidad real de garantizar que las costas atlánticas de Europa estén protegidas contra amenazas de tormentas presentes y futuras", añade.

Para realizar el estudio, los investigadores combinaron datos meteorológicos para medir cambios en la altura y la variabilidad de las olas de las costas de la Europa atlántica. Después los combinaron con la NAO, que afecta a la variabilidad climática en el hemisferio norte, y la WEPA, basada en la presión atmosférica a lo largo de la costa atlántica de Europa.


Comentario: Esto no es un buen presagio para el futuro porque los científicos están informando que la NAO está en su punto más débil en más de 1.500 años.


Los resultados mostraron que en todas las áreas se había producido un aumento promedio en las alturas de las olas invernales entre 1948 y 2017, aunque con variaciones que oscilaban entre los 10 milímetros al año en Escocia, cinco en Francia y uno en Portugal.