© Reuters'Alexander Petrov' y 'Ruslan Boshirov', en fotografías distribuidas por la Policía Metropolitana de Londres, Reino Unido, el 5 de septiembre de 2018
"El embajador británico declaró que Gran Bretaña no presentará ningún material", dijo Zajárova a los periodistas.
La portavoz añadió que "Londres también se negó a ofrecer cualquier otra información sobre el caso: los números de pasaportes, los patronímicos, los datos de formularios, etcétera".
"Esperamos que estos datos se comuniquen a través de Interpol [Organización Internacional de Policía Criminal]", señaló.
Este 5 de septiembre Scotland Yard publicó fotos de dos supuestos sospechosos involucrados en el ataque con sustancia tóxica contra Skripal y su hija a principios de marzo pasado en Salisbury.
La policía identificó a los sospechosos, Alexandr Petrov y Ruslán Boshírov, como nacionales de Rusia.
El organismo acusó también a los individuos de posesión y uso de armas químicas y de causar graves daños corporales a Yulia Skripal y al policía Nick Bailey.
La Fiscalía aseguró que tiene evidencias suficientes para enjuiciar a los dos sospechosos.
La primera ministra británica, Theresa May, afirmó que ambos son agentes de inteligencia rusos.
Londres había responsabilizado a Moscú del incidente en Salisbury, nada más abierta la investigación.
Moscú, a su vez, rechaza las acusaciones de Londres, que considera infundadas, y sigue reclamando acceso a las pruebas para poder colaborar con la investigación y también a los Skripal, ambos dados ya de alta y en paradero desconocido.
Comentario: Reino Unido, junto con Francia y Estados Unidos, han quedado en ridículo en Siria, después de que Rusia pusiera en evidencia la preparación de un ataque químico de falsa bandera para culpar al gobierno de Assad. Ahora hay que distraer a la opinión pública, de preferencia con un asunto que le recuerde que "Rusia es mala". ¿Qué mejor que darle un nuevo giro al gastado cuento de los Skripal, especialmente si se culpa a "agentes rusos" de "posesión y uso de armas químicas"?