El ataque de la semana pasada contra la ciudad siria de Latakia puede conducir a una completa redistribución de las cartas a nivel mundial. Así es por 2 razones, siendo la segunda de ellas algo que se sigue escondiendo a la opinión pública occidental.
En primer lugar, el ataque contra Latakia costó la vida a 15 militares rusos. En segundo lugar, en esa agresión, además de Israel, también estuvieron implicados el Reino Unido y Francia. Esta es la crisis potencialmente más peligrosa de los últimos 60 años. La interrogante que ahora se plantea es saber si el presidente estadounidense Trump, en plena campaña electoral legislativa, está en condiciones de apoyar a el presidente ruso, de manera que Estados Unidos y Rusia adopten sanciones contra las potencias coloniales, como ya lo hicieron en 1956, ante la crisis de Suez.
© Fuerzas de Defensa de IsraelEl jefe de la Fuerza Aérea israelí, Amikam Norkin (centro-derecha) se reúne con funcionarios rusos en Moscú el 20 de septiembre de 2018.
El 17 de septiembre de 2018, Francia, Israel y el Reino Unido realizaron una operación militar conjunta contra objetivos sirios. Como consecuencia del enfrentamiento provocado por esa operación, un avión ruso de reconocimiento fue derribado por fuego amigo sirio. El estudio de las grabaciones demuestra que un
F-16 israelí "se escondió" tras el Il-20 para protegerse del fuego de la defensa antiaérea siria, que acabó derribando por error el avión militar ruso.
El derribo de un avión militar ruso por causa de Israel durante una operación conjunta israelo-franco-británica ha provocado estupor en todas las cancillerías. Si en los 7 años que han transcurrido desde el inicio del conflicto en Siria había existido una línea roja, era que los protagonistas nunca ponían en peligro fuerzas rusas, estadounidenses o israelíes.
Comentario: Thierry Meyssan aporta datos interesantes, especialmente en lo que respecta a la
posible participación británica. Pero siempre suelen haber cosas por detrás que no alcanzamos a vislumbrar en la política internacional. Rusia pudo haber optado por no dar mucha atención a la participación de Francia porque prefiere no agravar las relaciones con ese país, ni con la OTAN. Además, en lo que le concierne a Rusia, las acciones que llevaron al derribo de su avión Il-20 y la muerte de 15 militares son responsabilidad de Israel, la participación de Francia parece haberse limitado a bombardeos contra Siria. Por lo tanto, es lógico que se centren en las acciones de Israel y no en las de Francia.
Si bien Washington ha expresado su gran preocupación con respecto a las medidas que Rusia implementará en respuesta, Trump ha
manifestado una actitud un tanto llamativa durante la reunión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas:
El presidente de EE.UU., Donald Trump, ha dado las gracias a Irán, Rusia y Siria "por desacelerar sustancialmente su ataque sobre la provincia [siria] de Idlib, después de pedirlo de manera muy fuerte y urgente", según expresó este miércoles ante el Consejo de Seguridad de la ONU.
Si hay algo que queda más o menos claro, es que este hecho impulsó una reconfiguración de la situación en Siria, en cierta medida. Si bien Israel aún podrá realizar ataques en Siria, será más difícil que lo haga una vez que Rusia
instale sus sistemas de defensa S-300 y sus otras medidas de bloqueo de comunicaciones en el Mar Mediterráneo. La implementación de estas medidas tomará 2 semanas, desde que fueron anunciadas, y, conociendo las tácticas indirectas de Israel para frustrar cualquier avance que propicie la paz en Siria, ¿podría utilizar a sus
fuerzas subsidiarias u otras estrategias para intentar detener las medidas de Rusia?
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Comentario: Sobre estos lunáticos que menciona Bennet, George Galloway expresa lo siguiente: Al respecto de los S-300 rusos en Siria, puede leer también: