Gerrit Blank, un niño alemán de 14 años de edad fue golpeado en la mano por un meteorito del tamaño de un chícharo dejándole una cicatriz.

De acuerdo al testimonio del niño, una roca de color rojo y caliente golpeó su mano antes de que se estrellara en el suelo dejando un cráter de 30 centímetros de diámetro en el suelo.

Con una probabilidad de 1 en un millón de que el meteorito lo golpeara y sobreviviera, el joven terminó con una terrible cicatriz de 3 pulgadas.

"Al principio sólo vi una larga bola de luz, de repente sentí dolor en mi mano, luego un gran ruido como el de la caída de un trueno," dijo el joven.

Los científicos se encuentran analizando el meteorito que cayó en Essen, Alemania, cuyos resultados hasta ahora obtenidos son la existencia de una propiedad magnética y características químicas que confirman su procedencia espacial.

No hay datos de que alguna vez, un meteorito haya matado a alguna personas, sin embargo a pesar de que sea muy raro, hay otros casos en los que han lastimado a alguien.

El sitio de noticias espaciales SPACE.com relata que en noviembre 30 de 1954, una ama de casa en Alabama se encontraba tomando una siesta en su sillón cuando de repente la despertó un meteorito de 1.4 kilogramos que se había estrellado en el techo de su casa, incrustado en un mueble y aterrizado en su cadera, causándole ciertas heridas.