Esta semana, el director de la oficina de análisis OVNI del gobierno de EEUU declaró que existen "pruebas" de una preocupante actividad de objetos voladores no identificados "en nuestro patio trasero".
© Tobias Bjerknes
Sin duda, las ramificaciones de cualquiera de las dos serían significativas. Pero los comentarios de Kirkpatrick, que llegan cuando está a punto de jubilarse tras una carrera de 27 años centrada en defensa e inteligencia, son más intrigantes porque también dice que "ninguno" de los cientos de informes OVNI militares analizados por su oficina recientemente "se han atribuido positivamente a actividades extranjeras".
Al mismo tiempo, Kirkpatrick y altos funcionarios de Defensa han descartado la posibilidad de que programas secretos estadounidenses o aviones experimentales expliquen los fenómenos.
Aunque los casos OVNI sospechosos "seguirán siendo investigados" en busca de vínculos extranjeros, los hechos de que se dispone parecen apoyar la explicación más sorprendente de Kirkpatrick para la actividad OVNI en el patio trasero de Estados Unidos: "extraterrestres".
Aparte de este notable desarrollo, la mera sugerencia de un alto funcionario del gobierno de que los "extraterrestres" podrían explicar cierta actividad OVNI es el último ejemplo de un sorprendente cambio de tono en relación con el fenómeno OVNI.
Durante más de medio siglo, la ofuscación, la desviación y el ridículo han definido el enfoque del gobierno ante lo que oficialmente denomina "fenómenos anómalos no identificados" o FANI. Pero en los últimos años, antiguos presidentes, altos funcionarios de defensa e inteligencia y miembros del Congreso han especulado abiertamente sobre explicaciones extraordinarias para los incidentes OVNI más desconcertantes.
El comentario de Kirkpatrick sobre "alienígenas" encaja en un patrón más amplio. A principios de este año, Kirkpatrick levantó ampollas cuando fue coautor del borrador de un artículo científico con el astrofísico de Harvard Avi Loeb en donde se planteaba la hipótesis de que "naves progenitoras" extraterrestres podrían liberar "muchas pequeñas sondas" para explorar planetas similares a la Tierra.
Dado que los encuentros OVNI contemporáneos más conocidos se producen sobre el océano, la sugerencia de Kirkpatrick y Loeb de que tales "sondas tecnológicas extraterrestres" "buscarían necesariamente agua" para repostar es digna de mención.
Y lo que es más importante, Kirkpatrick afirmó en una presentación reciente que los sensores y militares del gobierno estadounidense están observando "orbes metálicos" que "realizan maniobras aparentes muy interesantes" "en todo el mundo".
En declaraciones al Daily Mail, una fuente de inteligencia afirmó que hay "docenas" de vídeos inéditos grabados por drones de vigilancia, algunos de los cuales muestran "orbes" realizando "[maniobras] notables, como salirse de repente de la pantalla".
Además, al parecer múltiples sensores han observado "orbes metálicos" y "translúcidos" objetos esféricos que viajan a velocidades que van desde "estacionario a Mach 2", o el doble de la velocidad del sonido, sin "escape térmico [detectable]". Según Kirkpatrick, las enigmáticas características de vuelo de los objetos equivalen a un perfil OVNI único que su panel está "cazando".
¿Podrían estos "orbes metálicos" aparentemente muy avanzados haber inspirado al director de la oficina OVNI del gobierno a teorizar que "sondas extraterrestres" podrían estar explorando la Tierra?
Los "orbes metálicos" que coinciden con la descripción de Kirkpatrick han dejado perplejas a las tripulaciones aéreas militares estadounidenses durante 80 años. En la Segunda Guerra Mundial, informaron aviadores estadounidenses de encuentros con "gran número de esferas plateadas". The New York Times, Associated Press, Reuters, Stars and Stripes y el ahora desaparecido International News Service publicaron historias a finales de 1944 describiendo encuentros de tripulaciones aéreas militares con "misteriosas bolas plateadas flotando en el aire".
Según los reportajes, las "esferas plateadas" "flotaban en el aire solas o en racimos" y, con notables paralelismos con el perfil OVNI contemporáneo de Kirkpatrick, a veces aparecían "semitranslúcidas".
Newsweek siguió con un artículo del día de Navidad de 1944 titulado "El rompecabezas de la esfera plateada". Haciéndose eco de la naturaleza enigmática de los objetos, el titular de un segundo despacho de Associated Pess decía: "Bolas de plata vistas sobre el Reich intrigan a la ciencia".
Los encuentros de aviadores estadounidenses con misteriosos "orbes metálicos" no cesaron tras la Segunda Guerra Mundial. Las evaluaciones de los servicios de inteligencia sobre el fenómeno OVNI de finales de la década de 1940 y principios de la de 1950 describen "bolas plateadas" y objetos "esféricos" "de brillante lustre metálico" entre los ovnis más comúnmente observados, junto con discos "metálicos" de mayor tamaño.
El capitán Edward Ruppelt, primer director del Proyecto Libro Azul de la Fuerza Aérea estadounidense, un programa de análisis OVNI que duró dos décadas, describe varios encuentros militares dignos de mención con esferas metálicas en los años inmediatamente anteriores a que el gobierno de EEUU adoptara la política de "desmentir" todos los avistamientos de ovnis y desacreditar a los testigos, por muy creíbles que fueran.
Más recientemente, Ryan Graves, antiguo piloto de caza de la Marina estadounidense, describió cómo él y al menos entre 50 y 60 de sus compañeros aviadores observaban con frecuencia objetos anómalos en sus sensores mientras volaban frente a la costa este. Al principio, las naves se mostraban esquivas. Pero cuando los aviadores finalmente las observaron visualmente, incluso durante una angustiosa colisión casi en pleno vuelo, los objetos parecían translúcidos y esféricos, coincidiendo con las descripciones de la época de la Segunda Guerra Mundial de encuentros con "esferas transparentes".
En los últimos años han aparecido vídeos e imágenes de tres "orbes metálicos" y una esfera "semitranslúcida", todos ellos grabados por militares estadounidenses.
En un aparente guiño a la larga historia de encuentros de militares estadounidenses con misteriosos "orbes metálicos", el logotipo de la oficina gubernamental de análisis OVNI muestra de forma prominente una esfera plateada. Una imagen de archivo titulada "tecnología alienígena en una bola metálica" se oculta en un documento clave que describe la misión de la oficina.
Para no verse superado por el nuevo aprecio del poder ejecutivo por las referencias "alienígenas", el líder de la mayoría en el Senado, Chuck Schumer (demócrata de Nueva York), presentó recientemente una extraordinaria legislación relacionada con los ovnis.
Entre las amplias disposiciones destinadas a aumentar la transparencia del gobierno en materia OVNI, la legislación aborda las sorprendentes acusaciones de muchos funcionarios actuales y anteriores de alto nivel sobre la existencia de subrepticios programas de recuperación OVNI e ingeniería inversa.
Si se aprueba tal como está redactada, la ley de Schumer codificaría en la legislación federal definiciones de términos tan sorprendentes como "inteligencia no humana", "programa [de recuperación de ovnis e ingeniería inversa] heredado" y "tecnologías de origen desconocido". Además, exigiría a los contratistas privados actualmente en posesión de ovnis recuperados o "pruebas biológicas de inteligencia no humana" que entregaran todos esos objetos al gobierno estadounidense "en interés del bien público".
Marik von Rennenkampff fue analista de la Oficina de Seguridad Internacional y No Proliferación del Departamento de Estado de EEUU, así como funcionario del Departamento de Defensa de EEUU nombrado por la administración Obama.
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