Karymsky, uno de los volcanes más activos de la península de Kamchatka, al este de Rusia, está arrojando cenizas a una altura de 6.000 metros. Las autoridades locales informan que no hay ninguna amenaza para la población, dado que el pueblo más cercano se encuentra a 100 kilómetros del volcán.

La erupción comenzó el 2 de enero de 1996 y continua hasta ahora con una intensidad variable.