Kerry
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El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, condenó el domingo el "increíble acto de agresión" de Rusia en Ucrania
y advirtió de "repercusiones muy serias" por parte de Estados Unidos y otros países, incluyendo sanciones para aislar económicamente a Moscú.

"Simplemente uno no se comporta en el siglo XXI al estilo del siglo XIX al invadir otro país sobre la base de pretextos completamente inventados", dijo Kerry al programa "Face the Nation" de la cadena de televisión CBS.

No obstante, Kerry agregó que Rusia aún tiene "una serie de alternativas adecuadas" que puede elegir para distender la crisis.

Es un increíble acto de agresión. Es realmente un acto impresionante y deliberado el del presidente (Vladimir) Putin de invadir otro país. Rusia está violando la soberanía de Ucrania. Rusia está violando sus obligaciones internacionales", agregó Kerry.

El secretario dijo que el presidente estadounidense, Barack Obama, le dijo a Putin en una llamada telefónica de 90 minutos el sábado que "habrá serias repercusiones si esto persiste".

"El presidente (...) dijo al señor Putin que era imperativo encontrar un camino distinto para (...) revertir este acto de invasión".

Kerry dijo que los países del G8 y otras naciones están "preparados para aislar a Rusia" con una "extensa variedad de opciones" disponibles.

"Están preparados para imponer sanciones, para aislar económicamente a Rusia, el rublo ya está cayendo. Rusia tiene importantes desafíos económicos", dijo Kerry, al tiempo que mencionó restricciones a visas, congelación de activos y aislamiento comercial como posibles pasos.

Los comentarios de Kerry se produjeron en medio de las condenas a la acción de Rusia por parte de Washington y sus aliados.

Putin obtuvo el sábado autorización del Parlamento ruso para usar la fuerza militar para proteger a los ciudadanos rusos en Ucrania, desencadenando incesantes llamados de Occidente para que no intervenga.

Fuerzas rusas ya tomaron, sin derramamiento de sangre, el control de Crimea, una aislada península en el Mar Negro donde la mayoría de la población es de etnia rusa y donde Moscú cuenta con una base naval.