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Arabia Saudita, Bahréin y los Emiratos Árabes Unidos rompieron relaciones diplomáticas con Catar, el 5 de marzo de 2014, y próximamente podrían prohibir a la aerolínea Qatar Airways el sobrevuelo de sus territorios, medida que se traduciría en graves pérdidas financieras para ese emirato. Lo más grave sería después el posible cierre de la frontera de Arabia Saudita, único acceso terrestre de Catar al resto de la península arábiga.

El reino saudita, Bahréin y los Emiratos Árabes Unidos acusan a Catar de haber respaldado - en noviembre de 2013 - un intento de golpe de Estado de la Hermandad Musulmana en los Emiratos y de proseguir su acción subversiva a través del canal de televisión Al-Jazeera a pesar de que el emir Tamin Ben Hamad Al-Thani se había comprometido por escrito en Kuwait a poner fin a la injerencia catarí en los asuntos internos de sus vecinos.

El 22 de febrero de 2014, Al-Jazeera transmitió un sermón incendiario de su consejero espiritual, el jeque Yussef al-Qaradawi, también líder de la Hermandad Musulmana. Varios observadores estiman que la intervención del jeque contó con el respaldo del anterior emir de Catar, quien habría recuperado parte de sus prerrogativas a espaldas de su hijo y sucesor después de haber sido forzado a abdicar.

Kuwait y el sultanato de Omán no se unieron a los otros tres miembros del CCG en la ruptura de relaciones con Catar.

El hecho es que Arabia Saudita ha tomado públicamente posición en contra del yihadismo anunciando fuertes penas de cárcel contra todo súbdito saudita que se implique en conflictos armados en el exterior. El reino incluyó además el Frente al-Nusra, el Emirato Islámico de Irak y el Levante (EIIL) y la Hermandad Musulmana en su lista de organizaciones terroristas, decisiones que parecen contradecir la implicación de la propia Arabia Saudita en la formación del ejército antisirio estacionado en Jordania.

Luego de numerosos intentos de golpes de Estado en muchos países árabes en tiempos de la guerra fría, la Hermandad Musulmana se había convertido - a partir de 2005 - en una organización protegida por Washington, que trató en 2011 de llevarla al poder en todo el mundo árabe.

Pero, como resultado de su fracaso en Egipto y en Libia, la Hermandad Musulmana ha caído en desgracia en casi todas partes, con excepción de los conflictos contra Siria y Palestina (Hamas), donde Washington sigue apoyando a la cofradía en el marco de la guerra contra el Estado sirio y en las negociaciones con Israel.