(España) - Muchos son los estudios de social media que determinan que Mariano Rajoy es a día de hoy el político español más valorado en Twitter por delante de representantes de otras formaciones como Cayo Lara (IU), Pedro Sánchez (PSOE) o Pablo Iglesias (Podemos), su más acérrimo seguidor.

Concretamente, los 528.000 seguidores del presidente del Gobierno le mantienen a mucha distancia de los de Lara (149.000) o los de Pedro Sánchez (52.000, una décima parte de los que tiene Rajoy), aunque Iglesias sí que le pisa de cerca los talones al líder popular rebasando los 500.000 seguidores y situándole muy cerca de la cifra presidencial.

Precisamente, Rajoy agradecía hace algunos meses haber alcanzado esa gran cifra de 500.000 simpatizantes a través de este tuit en el que incluía un esperanzador y positivo mensaje hacia la nación.
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La cuestión es que la mayoría de esos estudios se han quedado tan sólo en la cáscara, no profundizando precisamente en esos admiradores, que en su mayoría son cuentas inactivas y bots, perfiles ficticios dados de alta en Twitter por sistemas automatizados de compañías que se dedican a mercadear con "incondicionales" para engordar cuentas con el fin de aparentar notoriedad pública.

La diferencia entre cuentas falsas e inactivas, es únicamente que las inactivas son reales, ubicadas usualmente en Indonesia, Tailandia o Brasil que, al haber tenido algo de "movimiento" en algún momento puntual, aunque sólo haya sido para la emisión de mensajes spam, no contabilizan como falsas, que se limitan a seguir sin interactuar de ningún modo, caracterizándose habitualmente por no tener ni siquiera avatar propio, siendo el típico huevo de Twitter la imagen principal de las mismas.
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A través de la web auditora de la red social Status People, la más fiable al respecto, averiguamos sumando cantidades que, de los 528.000 que figuran en la actualidad, 337,000 seguidores de Mariano Rajoy han sido adquiridos por otras vías por los gestores de la cuenta, haciendo que los verdaderos followers de la cuenta casi rocen los 200.000, una más que loable cantidad, algo más acorde a las cifras que barajan los demás políticos de primera línea de la política española.

La noticia tampoco debería pillarnos desprevenidos, ya que a lo largo del último año estudios similares han concluído que el Papa Francisco y el Presidente norteamericano, Barack Obama, han llegado a tener millones de fans de relleno. Este método es utilizado también por artistas de la talla de Lady Gaga para hacer ver a ojos de todos una impactante representación en las redes sociales que queda sólo en artificio, propiciando el "efecto bar", que hace que la gente comience a seguir a alguna personalidad por la simple inercia de ese "lleno" que transmite el número de adeptos.
Este post habría sido imposible sin la ayuda y colaboración de @entevlosni.