Un video que salió a la luz pública nuevamente pone a los "guardianes del orden" estadounidenses en el ojo del huracán, ya que la manera de actuar de muchos al parecer es la de "primero disparo y luego pregunto".

El lamentable hecho, que fue grabado por la cámara de uno de los agentes que participaron en la detención, ocurrió en noviembre del año pasado cuando un niño de seis años que padecía de autismo murió acribillado a tiros por elementos de la policía de Louisiana.

Jeremy Mardis
© DesconocidoJeremy Mardis, de primer grado, murió tras recibir cinco balazos en la cabeza y el pecho.
Jeremy murió en el interior del auto en el que él y su padre (Chris Few) viajaban, debido a las múltiples heridas de bala en la cabeza y pecho que recibió por parte de los policías, quienes abrieron fuego contra del vehículo al considerar un movimiento sospechoso dentro de él.

El video* fue parte de la evidencia en el juicio en contra de Derrick Stafford y Norris Greenhouse, los agentes involucrados en el caso, que fueron detenidos y se enfrentan a cargos de asesinato e intento de asesinato en segundo grado.

En la grabación se observa a uno de los agentes acercarse al automóvil tras haber accionado su arma en repetidas ocasiones y decir: "¡No había visto que había un niño en el coche!".

El video de evidencia


Comentario: Advertimos que el material contiene imágenes violentas.



(Con información de
Al Debate)