La milicia en cuestión se hace llamar 'Fuerza de Seguridad III%' y es uno de los distintos grupos armados que se están preparando para eventuales disturbios civiles, en el caso de que Hillary Clinton gane las elecciones este 8 de noviembre, reporta Reuters.
© Justin Mitchell ReutersUn miembro de la milicia 'III%' durante una práctica de tiro en Jackson, Georgia, EE.UU. el 29 de octubre de 2016.
¿Pero qué es lo que estos grupos paramilitares están dispuestos a defender en el marco de la campaña de Donald Trump? Chris Hill, alias 'Bloodagent', admira las promesas del magnate republicano de deportar inmigrantes ilegales, impedir que los musulmanes entren al país y construir un muro a lo largo de la frontera con México.
"Esta es la última oportunidad para salvar a Estados Unidos de la ruina", subraya Hill, que además es el fundador del grupo armado.
Comentario: Esto suena más a que Hill está intentando justificar su propia visión distorsionada de la realidad y sus intenciones belicistas, ya que Estados Unidos se encuentra en la ruina no por culpa de los musulmanes, o los mexicanos, o el resto de inmigrantes. Evidentemente, el problema es mucho más complejo de lo que presenta Chris Hill e irónicamente Hill es probablemente un descendiente de algún inmigrante europeo.
Aunque no deja de ser internaste que este tipo de declaraciones surjan en vísperas de una elección presidencial tan controversial como ésta. ¿Tal vez a alguien le interesa que de hecho ocurra una "guerra civil" en EEUU?
Según Ryan Lenz, investigador de una organización que combate el odio y el fanatismo contra personas vulnerables, la candidatura de Trump ha animado a grupos extremistas a hablar más abiertamente sobre la posibilidad de desafiar el estado de derecho.
En EE.UU. existen grupos paramilitares armados desde los noventa, pero se han multiplicado en años recientes como reacción a las políticas de control de armas del Gobierno de Barack Obama. En el marco de la actual campaña electoral, las ideas detrás de estos grupos paramilitares "están legitimadas", según Lenz.
"Si Trump pierde,cogeré mi mosquete", dijo un excongresista la semana pasada, mientras que un comentarista conservador fantaseó sobre la muerte de Clinton mientras hablaba en un mitin de Trump el domingo.
Comentario: Y por otro lado, la violencia policial continúa en ascenso. Es casi una receta perfecta para una revolución de colores en Estados Unidos. Las milicias por un lado y la población de color por el otro. Ambos completamente agotados de un gobierno que abusa de ellos constantemente. Pero todos tan reaccionarios que es fácil controlar su comportamiento por medio de la información que se les presenta y los fondos que se les otorga.