
El presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko (izquierda en la imagen) y su homólogo ruso Vladimir Putin.
"El entrenamiento en Polonia, Lituania y Ucrania de combatientes, incluyendo radicales bielorrusos, para cometer sabotajes, actos terroristas y un levantamiento militar en el país se está convirtiendo en una amenaza directa", afirmó Lukashenko en una reunión con responsables militares.
Los tres países comparten una frontera con Bielorrusia. Lituania y Polonia son miembros de la Unión Europea (UE) y de la alianza militar Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Lukashenko también acusó a Estados Unidos y la UE de albergar a "fugitivos" de Bielorrusia para convertirlos en una "fuerza política".
"Planean aumentar significativamente el apoyo a los elementos destructivos, agravar la situación en la frontera occidental hasta el punto de abrir un segundo frente en la frontera", afirmó.
Bielorrusia depende financiera y políticamente de su principal aliado Rusia.