Imagen
La paralización de los trabajadores se hace evidente en las calles y plazas de la capital española, que están cada vez más sucias y con basura acumulada. Con esta huelga exigen la eliminación de los expedientes de regulación de empleo y el plan de ajuste salarial.

Por décimo día consecutivo los trabajadores del sector de la limpieza de Madrid, capital de España, continuaron en protesta por el despido de obreros, rebajas salariales y aumento de horas laborales.

La corresponsal de teleSUR en ese país, Hilda Salas, informó a través de su cuenta en Twitter que este jueves se dieron manifestaciones espontáneas en apoyo a los reclamos de quienes prestan los servicios de limpieza en esa ciudad.

"Protesta espontánea en apoyo a la Huelga de Limpieza en Madrid con mensaje alusivo a alcaldesa", Ana Botella.

La paralización de estos trabajadores se hace evidente en las calles y plazas de la capital española, que están cada vez más sucias y con basura acumulada, reseñó Prensa Latina.

Con esta huelga, los trabajadores de limpieza exigen la eliminación de los expedientes de regulación de empleo (ERE), que permitirían despedir a mil 135 empleados, además de los 350 ya eliminados en agosto, de tres de las cuatro empresas que prestan estos servicios de limpieza en la capital española.

Asimismo, rechazan el plan de ajuste, consecuencia de los duros recortes puestos en marcha por el Gobierno conservador de Mariano Rajoy, que incluye también una reducción de sueldos de hasta 40 por ciento, tal como denunciaron las organizaciones sindicales.

Los manifestantes responsabilizan de esta situación a la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, esposa del expresidente del Gobierno José María Aznar, que llegó al cargo sin ser votada para reemplazar al entonces alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, cuando fue nombrado por Rajoy ministro de Justicia.

A Botella la acusan de reducir el presupuesto municipal de limpieza durante su gestión, según reseñó Prensa Latina.

La alcaldesa se ha defendido de estas acusaciones y responsabiliza a las empresas subcontratadas, a las que acusó de incumplir con los servicios mínimos durante la protesta.