Pedro Sánchez y Begoña Gómez
Entonces Sánchez dio comienzo a su vergonzosa política de claudicación frente al vecino magrebí, con cesiones unilaterales como la renuncia a defender la independencia del Sahara, las humillaciones simbólicas nada inocentes con la bandera de España boca abajo, las exenciones de cualquier control sanitario para los productos marroquíes, las inversiones en infraestructuras como embalses que, entre tanto, están siendo destruídos en nuestro país, el acudir como un perrito faldero cada vez que el rey Mohamed VI reclama que acuda... para ser recibido por funcionarios de ínfimo nivel e ignorado por el sátrapa alauíta, y así incontables desaires que no solamente perjudican al impresentable ocupante de la Moncloa, cuyo descrédito internacional crece como la espuma, sino a los intereses de España.
El último episodio de esta claudicación a cámara lenta es la inaceptable pasividad con que el ejecutivo consiente la realización de maniobras militares marroquíes frente a las Canarias, donde el descubrimiento del mayor yacimiento de tierras raras ha despertado la codicia de Marruecos, país que no se recata en invadir aguas españolas y que ya ha anunciado su intención de obtener la soberanía total de Ceuta, Melilla y Canarias para 2030, proyecto para el cual cuenta con el chantaje a un Pedro Sánchez que es el mejor aliado de la rapiña de nuestro codicioso vecino. Urge desalojar de la presidencia del gobierno a quien trabaja para los enemigos de España.
dicen que se conocieron en alguno de estos locales ...