El ataque tuvo lugar poco después de la medianoche en la villa de Qutab Khel, en la región tribal cercana a la frontera con Afganistán, dijo un oficial de la seguridad a medios de prensa locales.
Otras fuentes situaron las víctimas mortales en cuatro y los heridos en cinco. La identidad de los muertos no ha sido establecida, pero se cree que eran talibanes.
Las regiones tribales semiautónomas de Waziristán del Norte son uno de los principales bastiones de los grupos insurgentes y de Al Qaeda, que actúan de modo coordinado a lo largo de la frontera entre ambos países.
Aunque Islamabad ha preservado su alianza de más de 10 años con Washington, considera los ataques con drones lesivos a la soberanía nacional y contraproducentes a la guerra contra los rebeldes en tanto las bajas civiles que causan despiertan un natural sentimiento estadounidense.
La semana pasada, la Asamblea General de la ONU aprobó una resolución que una de sus partes exigió a los Estados abstenerse de emplear aviones no tripulados como medida antiterrorista porque sus ataques indiscriminados son contrarios al derecho internacional.
Aprobado por las 193 naciones miembros, el documento incluyó un acápite titulado Protección de los derechos humanos y las libertades fundamentales en la lucha contra el terrorismo.
La parte referida a los drones -por primera vez la Asamblea General se pronunció sobre el asunto -se incluyó como resultado de los intensos esfuerzos realizados por la delegación pakistaní.
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