Analistas citados hoy por la agencia Xinhua denunciaron que los ataques de Estados Unidos contra grupos del Estado Islámico en Siria están destinados a crear zonas parachoques que pueden ser usadas como plataforma para futuras agresiones contra Damasco. Un comentario de la agencia estatal china desde la capital siria precisa que esos bombardeos en áreas fronterizas forman parte de un plan de reestructurar la guerra contra el presidente Bashar al-Assad.
EEUU
La agencia de noticias entrevistó al jefe del Partido de la Juventud, Maher Murhej, quien aseguró que se trata de un plan estratégico militar centrado en golpes sobre ciertos puntos del norte y el sur de Siria para destruir la infraestructura en esas áreas y crear dos ejércitos de las facciones rebeldes.

Quieren establecer zonas parachoques junto a áreas de vuelo restringido que sirvan a plataforma para ataques en el futuro contra Siria, expresó Muerhej a Xinhua.

A juicio del dirigente, Turquía ha mostrado interés en crear zonas parachoques para deshacerse de gran número de refugiados y de comandantes rebeldes, así como de los campos de entrenamientos, una política que Jordania también tiene interés en llevar a cabo por las mismas razones.

A esto se une Israel, "que quiere mantener su territorio bien alejado del caos en la puerta vecina", agregó.

En resumen, Muerhej consideró que el gran perdedor en todo este ajedrez será el pueblo sirio y el blanco el gobierno de Damasco.

Según Xinhua, el analista político Magmoud Muri expresó que la imposición de estas áreas defensivas en la actual agresión internacional contra el Estado Islámico es de temer y llamó a los sirios a estar "muy alertas de las conspiraciones de Occidente".

Recordó que en 2003 Estados Unidos invadió Iraq y destruyó su ejército y la infraestructura de ese país, un hecho que "debe impulsarnos a ser muy cautelosos de la coalición estadounidense".

En su artículo, Xinhua cita también al investigador Hmaidi Abdullah, quien dijo que no cree que existan perspectivas de que Turquía imponga una zona parachoques, porque Ankara quiere la participación de Estados Unidos en esa operación.

El experto aseguró que si los turcos quieren entrar militarmente en Siria enfrentarán una gran fuerza en el terreno y que para imponer una zona de vuelo restringido requieren del apoyo de Estados Unidos y la Organización del Tratado del Atlántico Norte.

No creo que Estados Unidos esté listo para dar ese paso en estos momentos, añadió.