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El Parlamento de Ucrania aprobó el jueves, con la mayoría absoluta de 260 votos, una nueva ley que autoriza a los oficiales al mando de unidades militares usar la fuerza bruta, medidas especiales y armas contra soldados desertores que cometen "actos criminales".

Según especifica el texto, estos actos delictivos son los casos de "desobediencia de o resistencia ante órdenes recibidas, amenazas a superiores, abandono sin permiso de lugares de combate y de unidades militares".

Una nota explicativa sobre el documento, precisa que actualmente hay violaciones masivas de la disciplina militar, en particular, el abandono de las unidades y el consumo de alcohol, así como el desgano en la ejecución de las órdenes de altos rangos.

Por otro lado, la ratificación de la ley se debe a la creciente falta de entusiasmo por parte de los ucranianos para unirse a las filas de los uniformados. Se esperaba que unas 100.000 personas se sumaran al Ejército de Ucrania a lo largo del año 2014, sin embargo, según informó el 31 de enero el Ministerio de Defensa del país, cerca de 7500 ucranianos ya se enfrentan a cargos criminales por evasión del servicio militar.


Comentario: Es de esperar que que haya una falta de entusiasmo cuando los soldados son abandonados y, además, forzados a asesinar a su propio pueblo. Como lo comenta James Petras:
Un general ucraniano, que no es exactamente un rebelde, es un oficialista, declaró que no hay soldados rusos en Ucrania. Que todo es una mentira de su propio gobierno, que acusa a Rusia, cuando lo que hay en progreso es una guerra civil con el pueblo del Este, que busca mayor independencia, democracia y escapar de los controles que intenta imponerle la Junta de Kiev.

Es una declaración importante porque la prensa en todo occidente acusa a Rusia de fomentar el conflicto y que está metido en la guerra, y no es cierto. Es una guerra civil con los sectores populares del Este ganando terreno y el gobierno occidental, el gobierno de Kiev, muy debilitado y con poco apoyo popular. Incluso hay muchas deserciones de soldados que no piensan más en las mentiras del gobierno que acusa a Rusia de ser el combatiente, pero cuando están allá en el Este encuentran sólo a ucranianos.

Lo interesante sobre estas cifras es que de acuerdo con el asesor del presidente de Ucrania, Yury Biryukov, el número de desertores es el más alto que se ha registrado en el oeste de Ucrania, zona tradicionalmente señalada como la cuna del sentimiento antirruso.

Desde que el Gobierno de Ucrania lanzara en abril del año pasado una "operación antiterrorista" contra los prorrusos del este del país, los enfrentamientos entre el Ejército de Kiev y los independistas de las zonas orientas rusohablantes se han cobrado la vida de más de 5400 personas.

Occidente señala a Moscú como el culpable del conflicto del este de Ucrania por, según alega, armar a los prorrusos y enviar sus tropas a la zona para apoyar a las fuerzas independentistas. Rusia niega estas acusaciones.