Un chorro de material eyectado por el agujero negro supermasivo del centro de la galaxia Messier 87, se desplaza a velocidades que parecieran superar varias veces la de la luz. Numerosos astrónomos han estado observando este fenómeno durante décadas en distintas longitudes de onda, y por primera vez un grupo de ellos ha podido medir cuán rápido es el desplazamiento.

chorro M87 blast
© Nasa/RTNudos del chorro eyectado por el centro galáctico de M87

El investigador Ralph Kraft, del Centro de Astrofísica Harvard-Smithsonian, destaca en un comunicado difundido por la NASA a principios de esta semana que registrar velocidades tan extremas se hizo posible gracias a las observaciones en rayos X del telescopio orbital Chandra.

La velocidad fue calculada para dos nudos de interés particular para los astrónomos, localizados en el chorro aproximadamente a 900 y 2.500 años luz del agujero negroM87*, respectivamente. Con este fin se utilizaron las imágenes de radiografía tomadas durante un lustro, entre el 2012 y el 2017, que permitieron rastrear el movimiento de ambos nudos.

La información recabada muestra que el nudo más cercano al centro galáctico viaja a una increíble velocidad que aparenta ser 6,3 veces la de la luz, mientras que el más distante lo haría a 2,4 veces la velocidad de la luz. Los científicos estiman asimismo que el nudo más rápido se ha desteñido o disminuido en un 70 % dentro del citado lapso, algo que se debería a la pérdida de energía en sus partículas a medida que forman espirales en torno al eje del campo magnético.

Los astrofísicos estadounidenses se muestran sin embargo bastante cautelosos respecto a las cifras obtenidas, al punto de añadir la palabra "aparente" al índice respectivo. Las partículas dentro del chorro emitido por el M87* "en realidad están viajando cerca del límite de velocidad cósmica", asegura Brad Snios, autor principal del estudio.

"Una de las leyes inquebrantables de la física es que nada puede moverse más rápido que la velocidad de la luz", recuerda el investigador. Por lo tanto, descarta su ruptura con los patrones establecidos por la teoría de relatividad y solo admite que se trata de un "fenómeno sorprendente, llamado movimiento superlumínico".

El agujero negro emisor de este flujo de partículas es el mismo cuya imagen combinada fue divulgada en abril pasado como la primera foto de un horizonte de sucesos. El bautizado 'Powehi' es de los más pesados objetos celestes conocidos y se sitúa a aproximadamente 55 millones de años luz de la Tierra.