(España) - Parece que últimamente los medios canarios y sus articulistas se están llevando la palma en cuanto a su sometimiento a esta dictadura política y sanitaria que estamos sufriendo. Y parece que no tienen otra forma de expresar ese sometimiento que no sea el insulto e incluso la incitación a la persecución política y social de todo aquel que no se quiera vacunar.
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El último caso que nos hemos encontrado es el de un columnista del periódico 'El Día' de Tenerife, el caso de Alfonso González Jerez. Con solo leer el titular de ese artículo ya podemos imaginarnos con qué nos vamos a encontrar: "Señoritismo negacionista". Pueden imaginar por dónde van los tiros, ¿verdad?

Pero lo más sorprendente de ese artículo ya no son los insultos hacia los que no se vacunen (señoritos, negacionistas, patán...) es su defensa a ultranza de algo que es completamente ilegal aquí y en casi toda Europa: el famoso pasaporte sanitario. De todas formas, no sorprende que González Jerez no lo sepa y defienda esa ilegalidad para "que no le maten los no vacunados" puesto que llega incluso a referirse a Canarias como un "país": "Canarias ha sido un país que ha sufrido comparativamente menos por la pandemia vírica..."

En el caso de este articulista nos volvemos a encontrar con otro tipo que cree estar unos metros por encima de los demás, que cree ser tan inteligente y tan listo, que le da derecho al insulto, al desprecio e incluso a buscar la persecución de quien decida hacer con su cuerpo lo que le de la gana. El caso de otro "valiente" que no se atrevería a decirle nada a una mujer que decidiera abortar, puesto que el cuerpo es suyo, o a alguien que decidiera cambiar de sexo porque en realidad, el autor del artículo no es más que la voz de su amo ya que si no se va fuera, no sale en la foto.

De todas formas es importante que toda esta gente se vaya retratando ya sea porque piensa realmente así o porque le obliguen a escribir estas sandeces. Y es importante porque toda esta locura acabará algún día y saldrá a la luz toda la verdad. Y cuando llegue ese día, buscaremos en esa gran lista que ya hay de cobardes que han colaborado con la farsa para que den su versión, pero delante de un juez. No sabemos cuánto tardará en llegar ese ansiado día pero estén seguros de algo, nos vamos a cansar de escuchar la ya famosa frase de "no se podía saber".