Las altas temperaturas hacen que el aire sea menos denso, por lo que se necesita menos peso al despegar.
United airlines
© David Zalubowski / AP
El extremo calor que azota algunas zonas de EE.UU. está obligando a las aerolíneas a ajustar sus operaciones en las ciudades más afectadas, reduciendo el combustible o el equipaje y, en algunos casos, incluso limitando la cantidad de pasajeros, informa Bloomberg.

Las altas temperaturas provocan que el aire sea menos denso, por lo que se necesita menos peso al despegar y distancias de despegue más largas para producir suficiente sustentación (fuerza aerodinámica sobre el ala). De esta forma, las compañías aéreas tienen que reducir el peso de los aviones, explica la agencia.

Varios pasajeros se bajaron voluntariamente el 17 de julio de un vuelo interno de Delta Air Lines en Las Vegas (Nevada, EE.UU.), después que se presentaran problemas con el peso del avión por el calor.
"Se han puesto en marcha protocolos adicionales para abordar los impactos operativos que el calor extremo tiene en los aviones, incluyendo cargar menos combustible para tener en cuenta el peso y el equilibrio, así como para programar el reabastecimiento a lo largo de la ruta cuando sea necesario", comunicó la aerolínea.
Por su parte, Allegiant Airlines anunció que retrasará los vuelos en caso de que se presente una amenaza para la seguridad o la comodidad de los pasajeros.

EE.UU. no es la única nación afectada por la ola de calor extremo. Las altas temperaturas azotan también países europeos y asiáticos.

El 3 de julio, la Tierra alcanzó la temperatura más alta en la historia desde que se iniciaron los registros, según datos de los Centros Nacionales de Predicción Ambiental estadounidense. La temperatura promedio mundial fue de 17,01 °C, superando el récord anterior de 16,92 °C alcanzado en agosto de 2016 y en julio de 2022, lo que destaca los peligros de las emisiones de carbono generadas por la quema de combustibles fósiles.