Traducido por el equipo de SOTT.net

El constante desplazamiento de animales salvajes hacia las viviendas humanas ha sembrado el pánico entre la población. En los últimos días han aumentado los ataques de osos negros en todo el Valle. Se cree que la conversión del hábitat natural del oso en huertos y tierras de cultivo es la razón principal de los ataques de las últimas tres décadas.
Asiatic black bear
Oso negro asiático.
Otra razón es el bloqueo de varias zonas fronterizas con vallas y otras barreras que restringen el movimiento de los animales. Los habitantes de zonas remotas de Cachemira viven atemorizados por el aumento de los ataques de osos negros.

Hoy, 6 de septiembre, un hombre ha resultado herido tras ser atacado por un oso en la zona de Pachgam nard Kund, en el distrito de Kulgam, en Cachemira del Sur. Ha sido identificado como Manzoor Ahmad, de Pachgam.

Anteriormente, el 4 de septiembre, un hombre de 40 años fue atacado y herido por un oso negro en el pueblo de Drangsoo, en la zona de Mawar del distrito de Kupwara. Los funcionarios dijeron que el hombre herido fue identificado como Mushtaq Ahmad Bhat.

El 3 de septiembre, un hombre resultó herido tras ser atacado por un oso en su casa de Marg Akhaal, en Kulgam, al sur de Cachemira. La persona herida ha sido identificada como Mubashir Bajaad, S/o Mohd Rafiq Bajad.

El 2 de septiembre, un anciano sufrió heridas cuando un oso negro le atacó mientras trabajaba en su huerto en el pueblo de Lawoosa, en el distrito de Kupwara, al norte de Cachemira. El herido ha sido identificado como Mohammad Sultan Shiekh, de 60 años, residente en Lawoosa Mawer.

El 31 de agosto, un hombre fue atacado y herido por un oso negro en la zona de Verinaag, en el distrito de Anantnag, en Cachemira del Sur. Fue identificado como Ghulam Rasool Rather y estaba paseando por su pueblo natal de Zmalgam, en Verinag, cuando apareció un oso y le atacó. Según los informes, los aldeanos rescataron a Rather y lo trasladaron al PHC de Verinag para que recibiera tratamiento. Sin embargo, los médicos lo remitieron al GMC de Anantnag para que recibiera tratamiento avanzado.

El 29 de agosto, tres personas, entre ellas una mujer, resultaron heridas tras ser atacadas por un oso en la zona de Nagam de Damhal Hanjipora, en el distrito de Kulgam, en Cachemira del Sur.

Según los informes, el trío estaba trabajando en un huerto cuando el oso les atacó. Las personas heridas fueron identificadas como Mohmad Ramzan Malik, Mohamad Shafi Malik y Raja Begum y todos son de Nagam Damhaal Hanjipora.

El 28 de agosto, un niño de 7 años murió mutilado por el ataque de un animal salvaje en Bandipora. Inicialmente se sospechó que había sido atacado por un leopardo, dadas sus terribles heridas y la frecuente presencia de leopardos en la zona en los últimos tiempos. Tras una larga búsqueda, el niño fue encontrado en un bosque cercano. El niño, identificado como Zaid Bashir, desapareció el lunes 27 de agosto y su cuerpo fue hallado en el bosque con múltiples heridas y signos de mutilación. Según testigos presenciales, algunas partes de su cuerpo habían sido devoradas por el animal salvaje.

El 11 de agosto, en un trágico incidente, un hombre de 50 años, que fue atacado por un oso negro en el pueblo de Balhama de Arin en el distrito de Bandipora casi dos semanas sucumbe a las heridas. Fue identificado como Ghulam Mohammad Wani y estaba bajo tratamiento en SKIMS, después de haber sido atacado por un oso negro el 29 de julio. A pesar de todos los esfuerzos posibles, no ha podido ser salvado, ha declarado un médico.

Según el estudio del que son autores Aaliya Mir, amante de los animales, Shanmugavelu Swaminthan, Rashid Naqash, Thomas Sharp y Attur Sanmugam Arum. Todos ellos son miembros de Wild life SOS excepto Naqash, que es funcionario del gobierno, muestra claramente que en el valle de Cachemira los ataques han sido relativamente frecuentes en las últimas 2 o 3 décadas.

Cita datos del Departamento de Protección de la Vida Silvestre de Jammu y Cachemira.

El departamento registró 2.357 ataques de oso negro asiático en el Valle entre 2000 y 2020.

Un total de 2.243 ataques, el 95,2% de los casos, se saldaron con heridos y 114 ataques, el 4,8% de los casos, con muertos.