La presunta mala relación desde hace meses entre el presidente ucraniano Volodímir Zelenski y el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas ucranianas, Valeri Zaluzhni, parece haber llegado a un punto crítico luego de que el mandatario supuestamente le pidiera su renuncia, según un reporte del medio británico 'The Economist'
Zalzunhi
© P Photo / Ukrainian Presidential Press Office
Durante la noche de el 30 de enero se habría celebrado una reunión en la que Zelenski le comunicó al general Zaluzhni que había decidido destituirle para ponerlo en otro cargo, como secretario del Consejo de Seguridad Nacional, pero el jefe militar lo habría rechazado, según los reportes.

La revista británica revela que no se ha hecho oficial la destitución, pero que ya se están buscando posibles sustitutos.
"Se habla de dos generales como aspirantes al puesto de Zaluzhni: Oleksandr Syrsky, de 58 años, y Kyrylo Budanov, de 38 años. Ambos se consideran cercanos al equipo presidencial", destaca el medio.
Otros medios occidentales, como The New York Times, también han informado sobre la supuesta relación ríspida entre Zelenski y Zaluzhni debido a la gran popularidad que tiene el segundo en todo el país, en momentos complicados para Kiev por el fracaso de la contraofensiva ucraniana.

Desde hace meses, varios medios y especialistas han advertido sobre el deterioro de esta relación, que comenzó a presentar problemas el año pasado, cuando el comandante dio una entrevista a The Economist en la que dejó ver ciertas diferencias con el mandatario y dijo que la contraofensiva ucraniana estaba en un "punto muerto". Zelenski tuvo que salir a decir en público que no estaba de acuerdo con esa percepción e incluso reprendió al general.

Además, Zelenski teme que el militar tenga aspiraciones políticas, luego de que algunas encuestas le mostraban repetidamente más popular que su presidente.

The Economist destaca que la posible destitución de Zaluzhni llega en uno de los peores momentos para Ucrania, pues la contraofensiva de verano no dio los resultados esperados y se enfrenta a la incertidumbre sobre el grado de apoyo extranjero que puede esperar.