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El pretexto es el programa nuclear iraní: Las fuerzas armadas británicas están organizando un plan de contingencia para llevar a cabo una posible acción contra Irán preocupadas por sus planes de enriquecimiento de uranio.

El Ministerio de Defensa británico cree que EEUU podría adelantar sus planes para atacar con misiles algunas instalaciones iraníes clave. Algunos oficiales británicos dicen que si Washington presiona podría recibir la ayuda del Reino Unido, a pesar de las reservas que existen en la coalición de Gobierno, según informa el diario 'The Guardian'.

Anticipándose a un posible ataque, oficiales militares británicos están examinando cuál sería el mejor lugar para desplegar barcos de la armada Real británica y submarinos equipados con misiles Tomahawk durante los próximos meses como parte de una campaña aérea y terrestre.

Creen que EEUU podría pedirles permiso para realizar ataques desde Diego Garcia, el territorio británico en el océano Índico, que los estadounidenses han utilizado en ocasiones anteriores durante conflictos en Oriente Próximo.

El diario israelí 'Yediot Aharonot' abrió el viernes la caja de Pandora atómica en Israel, Washington y Teherán al realizar en su portada la siguiente pregunta: "¿Han decidido ya el primer ministro Benjamin Netanyahu y el ministro de Defensa, Ehud Barak, el ataque militar contra las centrales nucleares en Irán?"

Según informa Sal Emergui desde entonces, cada día aparecen señales sobre la intención de Israel de acelerar su plan para evitar que los ayatolás tengan armas nucleares eliminando así lo que muchos israelíes definen como "amenaza existencial".

El diario 'Haaretz' revelaba el miércoles que Netanyahu busca la mayoría en el gabinete de seguridad para dar luz verde al ataque. En Israel, gran parte de los ministros confía en la presión diplomática internacional dejando la opción militar "como la última" y siempre bajo el liderazgo de Estados Unidos.

Por su parte, el diario 'The Guardian' ha hablado con varios oficiales de defensa en las últimas semanas que señalan que tras la revolución en Libia, Irán se ha convertido en el centro de las preocupaciones diplomáticas del Reino Unido.