El gobierno alemán de la canciller Angela Merkel exigió ayer a Israel que dé marcha atrás a sus planes de construcción habitacional de asentamientos en el territorio palestino.

El portavoz gubernamental Georg Streiter advirtió en Berlín de las negativas consecuencias que puede tener la construcción de más colonias para las conversaciones de paz entre Israel y Palestina, informó DPA.

El Ministerio israelí de Vivienda publicó el pasado domingo las licitaciones para la construcción de otras 1.028 viviendas en Jerusalén Este y en Cisjordania.

El proyecto habitacional está distribuido en la construcción de quinientas viviendas en Har Homa, en el sur de Jerusalén, otras 348 serán levantadas en la colonia de Beitar Ilit y 180 en Givat Zeew, entre Jerusalén y Ramala.

El anuncio de construcción de unidades residenciales es un "mensaje terrible" para el proceso de paz entre las naciones de Medio Oriente, aseveró Streiter. "Eso entierra la confianza en la disposición de Israel a negociar", acotó.

El Ejecutivo de Merkel ha reiterado con frecuencia en los últimos meses su rechazo a la construcción de asentamientos israelíes en el territorio, pues cuestiona cualquier tratado de paz.

Tel Aviv diferencia entre asentamientos autorizados y no autorizados. Sin embargo, desde el punto de vista internacional todas las colonias levantadas sobre territorio palestino son ilegales.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, decidió acelerar la colonización en Jerusalén Este y en Cisjordania en represalia por la iniciativa palestina de convertirse en miembro de la Organización de Naciones Unidas (ONU)