- Victor Barahona relata el sufrimiento al que le sometió su padre adoptivo durante meses.
- Le pegaba los ojos con pegamento, le hacía comer cucarachas y le bañaba con agua helada.
- El cuerpo de Nubia, de 10 años, estaba descompuesto en una camioneta del padrastro.


Jorge Barahona
© Desconocido
Jorge Barahona vivía junto a su mujer Carmen y sus dos hijos adoptivos Victor y Nubia en el estado de Miami-Dade (Florida). Los pequeños, lejos de vivir en una familia normal, sufrieron abusos y torturas hasta el extremo durante meses. Después del asesinato de la joven, de 10 años, en febrero del año pasado, han salido a la luz los verdaderos abusos a los que los menores fueron sometidos por su padre adoptivo. Según el relato de Victor, el hombre les pegaba los ojos con pegamento, les hacía comer cucarachas, les bañaba en agua helada y les golpeaba constantemente.

El día de San Valentín del año pasado fue el día en el que Nubia terminó con su sufrimiento. Su padre adoptivo, Jorge Barahona, acabó con su vida después de meses y meses de abusos y torturas.

Ha sido su hermano mellizo, Victor, el que ha relatado los tremendos hechos a través de la persona que se hizo cargo de él tras descubrirse el crimen.

Según publica algunos medios como el Daily Mail, el joven ha explicado cómo su padre adoptivo, entre otras prácticas, les pegaba los ojos con pegamento, les hacía comer cucarachas y les bañaba una vez a la semana con agua helada después de sujetarles los pies y las manos.

Además, en alguna ocasión, el padre le tapó la cabeza con una bolsa de plástico hasta que Victor se desmayaba.

Según se ha revelado, a la hora de las comidas, Victor y su hermana Nubia sólo comían pan y leche, mientras que el resto de "comida buena" se le administraba al perro de la familia.

"Tartamudeaba cuando hablaba. No podía terminar las frases. Tenía un tic nervioso en los ojos. Y la boca le temblaba. No quería hablar sobre lo que tuvo que sufrir su hermana", asegura Katia García, la mujer que se hizo cargo del menor cuando se destapó el caso.

La Fiscalía Estatal del Condado Miami-Dade solicita la pena de muerte para Jorge y su mujer Carmen, acusados de haber asesinado a Nubia, de 10 años, y de haber torturado al pequeño Víctor.