© El TiempoLas comunidades perjudicadas piden el saneamiento del río.
En la zona viven 1.500 familias en asentamientos indígenas kariñas, quienes temen por el suministro de agua. Lismari Cedeño, habitante de la zona, indicó que si bien cuentan con camiones cisternas para surtirse, la mayor parte del agua la toman del río pues con ella riegan sus cultivos y realizan las labores cotidianas como lavar la ropa o bañarse.
Las comunidades de Tascabaña 1 y 2 no tienen sus sembradíos en la ribera del morichal, pero sí se surten de él para el riego y para el ganado vacuno, caballar y porcino que crían.
Petróleos de Venezuela aseguró que "está garantizada la integridad de los ríos Tascabaña y Guanipa, porque en las inspecciones realizadas se ha comprobado que las aguas no han tenido ningún tipo de afectación por este incidente".
Agregaron que controlaron el vertido del crudo en tiempo récord. No obstante, la situación ha llevado a quienes tienen ganado a alquilar potreros cercanos donde mantenerlos.
Si bien no hay una fecha precisa, los habitantes de la zona aseguran que la mancha de petróleo ha afectado el río aproximadamente durante diez días y que fue descubierta por un habitante de la zona que llevaba a su ganado a beber agua.
Sin mantenimiento
"Todo empezó por una falla en la abrazadera del tubo, en la parte donde van los tornillos a causa de la falta de mantenimiento", afirmó el concejal indígena Benito Machuca, presidente de la Cámara Municipal de Freites y habitante del sector.
El ecologista Pedro Lavana aseguró que se trata "hasta de 20 tuberías de crudo, de diferentes diámetros, las que atraviesan los asentamientos indígenas de la zona de Tascabaña, y la mayoría de ellas tienen data de hace 20 ó 30 años y requieren mantenimiento inmediato".
La alcaldesa del municipio, Evelyn Urdaneta, refirió que "la tubería está bastante deteriorada y la zona verde de los alrededores está quemada en algunos sectores". Informó que en el tubo se realiza un trabajo de encamisado, que consiste en colocar una tubería sobre la zona afectada para evitar que se rompa más.
El sector es custodiado por funcionarios de la Guardia Nacional y en los trabajos de saneamiento trabajan, además del personal asignado por Pdvsa, 10 habitantes de Tascabaña 1 y 10 de Tascabaña 2.
Deterioro ambiental. No hay información oficial sobre la cantidad de petróleo derramada en el río. Algunos trabajadores de la estatal, que prefirieron no identificarse, especularon que podría tratarse de cerca de 300 barriles de hidrocarburo.
Antonio Di Lisio, investigador del Centro de Estudios Integrales del Ambiente de la Universidad Central de Venezuela, sostiene que cualquier vertido de crudo superior a los 100 barriles genera consecuencias importantes para el ambiente. María Eugenia Gil, de la ONG Agua Clara, apuntó que al tratarse de un derrame fluvial va a tener impacto en el suelo, el aire, la flora y la fauna: "Es un derrame que tiene varios días, y si bien es cierto que tiene menor impacto -pues se vertió menos cantidad que en el río Guarapiche- no se explica cómo luego de casi un siglo de experiencia petrolera no podemos atender con prontitud este tipo de contingencias", cuestionó.
Lavana refirió que si se realiza un trabajo de recuperación "en el que intervenga la mano del hombre y se remueve la capa vegetal, podríamos hablar de 20 años de recuperación".
Ambiente en alerta roja
No sólo el derrame de crudo afecta la situación del ambiente en el municipio Freites del estado Anzoátegui. Desde hace cuatro años se descubrió que los pozos de agua subterránea de los que se servían las comunidades de Tascabaña 1 y 2 para sus actividades diarias presentan contaminación a causa del gas.
Benito Machuca, presidente de la Cámara Municipal de Freites, explicó que si bien desde hace tiempo se conoce la situación "todavía la comunidad no sabe con certeza cómo actuar. Se suponía que Pdvsa iba a instalar una planta potabilizadora del agua en el único pozo que se descubrió que no estaba contaminado, pero han pasado cuatro años y aún no se ha culminado".
Milagros Villafane, presidenta del Movimiento Iniciativa de los Consumidores -que educa para el consumo responsable y cuidado del medio ambiente, con sede en Anzoátegui- subrayó que "en el estado se han identificado especies vegetales que han sufrido mutaciones derivadas de la contaminación que genera la empresa petrolera".
Señaló que el impacto de derrames petroleros como los ocurridos sobre el río Guarapiche y el Tascabaña debe ser evaluado por expertos como los de del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente. "Debería declararse la emergencia ambiental, a causa de la contaminación con gas, los derrames petroleros y el coque", concluyó.
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