Sólo como sarcasmo agresivo por parte tanto del Estado pueden ser percibidos tanto el nombre de "Zeus Xenios" como la fecha del 4 de agosto, seleccionados para el nuevo pogromo racista desatado contra "justos e injustos" en las calles de Atenas, con palizas y torturas de inmigrantes. Se trata de la distracción racista más vil de un gobierno que está preparando un nuevo memorándum, con recortes fuertes que van a sembrar la pobreza y la miseria con el cierre de hospitales, guarderías y escuelas, con reducciones en salarios y pensiones, con recortes de los gastos sanitarios, con el saqueo de la riqueza pública y de las instituciones públicas, y con su venta a particulares.
Los mecanismos del Poder están tratando de convencer a los súbditos griegos que los pogromos siempre han constituido una solución, por la que no se optaba en el pasado a causa del coste político. Sin embargo, por muchos que sean los pogromos desatados, ¡los millones de personas que sufren la agresividad implacable de la soberanía global, que se manifiesta así que ella asegure su superioridad energética, van a aplastar cualquier tipo de fronteras, van a anular cualquier política migratoria, van a superar cualquier miedo a vivir! Entendemos por fin que los pogromos son dirigidos a las clases subordinadas y peligrosas para el Poder, en todo el territorio del Estado griego...
Y sería mejor, antes de preguntarse "¿qué tienen que hacer los inmigrantes ilegales en Grecia?", responder a la pregunta" ¿qué tiene que hacer el ejército griego en 16 países del mundo en este momento?"...
El pogromo racista, sin embargo, se ha convertido en un ambiente xenófobo creciente. La trágica historia de la chica 15añera en Paros, que se encuentra en la unidad de cuidados intensivos del hospital con la cara aplastada y lesiones en todo su cuerpo, se convierte en otro botín racista. El autor de la agresión, abominable e inhumano, quienquiera que sea, independientemente del color de su piel, de religión y de lengua, tiene que recibir una respuesta adecuada por parte de una sociedad que se defiende a sí misma y a todos sus miembros por separado.
¿Justifica, sin embargo, todo lo que ha sucedido, un pogromo generalizado en contra de todos los que tienen la tez oscura? ¿Acaso nos olvidamos de que el crimen no tiene patria, que la naturaleza humana despliega sus facetas oscuras en todas partes de la Tierra, sin ningún tipo de "selectividad racial"?
Los medios de desinformación del Régimen continúan impetuosos, jugando su papel de apoyar, respaldar e incitar a más represión, pidiendo sangre humana. Los grandes contratistas, los canallas, los que "se comieron el dinero juntos y lo sacaron al extranjero", han invertido en el racismo y el fascismo.
Del mismo modo, los comunicados del gobierno muestran irrefutablemente la careta nazista que se ha puesto y la actitud fascista que cultiva la secta gubernamental, autoritaria y fascista. Insulto es nuestra tolerancia hacia todos vosotros, que os permite imponer, mediante la represión, la venta de nuestra vida y la fascistización de la vida política y social. Vosotros sois los habéis eliminado los pequeños y medianos negocios. Insulto es que vosotros habléis de desempleo, si vosotros habéis hecho llegar la tasa de desempleo al 24%, al tiempo que las personas sin hogar pueden llenar toda una ciudad y el número de las personas que se suicidan está aumentando exponencialmente día tras día.
La legalización de los inmigrantes, la concesión de asilo a los refugiados, el cierre de los campos de reclusión, debería ser nuestra respuesta al escalonamiento del racismo y a la política que conduce a un punto muerto y que busca chivos expiatorios para justificar el fracaso de las recetas de los memorandos.
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