Fukushima
© Flickr.comImágen de Fukushima en Japón, central nuclear.
A fines de julio, médicos examinaron a 210.000 menores de 18 años y detectaron 18 casos de cáncer de tiroides en la región circundante a la central nuclear de Fukushima Daiichi y 25 pacientes sospechosos, informó la televisión NHK.

Los investigadores de un comité de monitoreo organizado por la región informaron que continuarán examinando otras 150 mil personas, hasta llegar a 360 mil análisis, señala BFM, citado al medio televisivo.

De acuerdo a los resultados preliminares, los médicos estiman que la causa del cáncer es producto de la radioactividad liberada por la Central Nuclear Fukushina Daiichi, sin embargo oficialmente la Universidad de Medicina en dicha prefectura, dice que no están seguros que la marcada incidencia corresponde al accidente y fuga radiactiva que mantiene en alerta a la región desde el 11 de marzo de 2011, fecha del terremoto y maremoto que azotó la costa este de la isla japonesa.

Según comunicó la Universidad de Medicina de Fukushima ellos presuponían que la enfermedad tardaba cuatro a cinco años en manifestarse, informa Internovosti.

Los científicos a su vez destacaron que el riesgo de cáncer en las mujeres de Fukushima será de un 0,85 por ciento y en los hombres de 0,23 por ciento, agrega Internovosti.

Otro estudio realizado a un grupo menor de personas, y reportado en junio revela que un mes después se detectaron seis casos más de tumoraciones, informa TM News.

Oficialmente se informa que en Ucrania, después del desastre nuclear de Chernóbil, los efectos en la salud se reportaron tres a cinco años más tarde.

Los resultados médicos se difunden en el marco de nuevas emergencias que vive esta semana la planta nuclear controlada por la empresa Tokio Electric Power (TEPCO). La empresa japonesa pidió ayuda externa para manejar la situación.

La instalación de tanques de contención de las aguas radiactivas no dio resultado, según informes de la propia empresa en agosto. El 19 del presente mes TEPCO afirmó que unas 300 toneladas de agua altamente tóxica se vertieron a la tierra circundante. Ayer el director de la empresa, Tsunemasa Nitsuma se disculpó porque estas aguas contaminaron el Océano Pacífico.