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Por primera vez la Encuesta Nacional de Salud dejó al descubierto la prevalencia que registra la enfermedad celíaca en Chile: una de cada cien personas de más de 15 años es intolerante al gluten, una proteína que está presente en la gran mayoría de los alimentos al encontrarse en el trigo, centeno y cebada, y que si no se trata puede provocar desde dolor de estómago o pérdida de peso, hasta afectar el normal crecimiento del cuerpo, entre otros malestares.

Para la Fundación de Intolerancia al Gluten, Convivir, históricamente a esta enfermedad se la ha identificado como una patología poco común, "pero con estos resultados nos damos cuenta de que no es así y que estamos frente a un problema de salud pública", explica Helga Santibáñez, coordinadora de la entidad. Y es que para los especialistas, su desconocimiento o baja sospecha se debe exclusivamente a que se suele confundir con otros trastornos gastrointestinales, como la gastritis.

De hecho, se estima que nueve de cada diez celíacos desconocen padecer la enfermedad, un dato no menor considerando que "habiendo un individuo con celiaquía, aumenta el riesgo también en el grupo familiar", indica Sandra Hirsch, gastroenteróloga de la Clínica Santa María, sobre el trastorno que es más frecuente en mujeres que en hombres. De hecho, la gastroenteróloga de Clínica Avansalud, Viviana Albornoz, explica que antes "no se pensaba en su existencia y sólo se planteaba en pacientes con diarrea. Hoy, en cambio, hemos aprendido a sospecharla en pacientes con alteraciones en exámenes de laboratorio, como anemia y niveles de calcio bajo, pese a tener un tránsito intestinal normal".

Ha sido gracias al avance de los métodos de diagnóstico, como los exámenes de sangre y la biopsia intestinal, que se ha mejorado la detección de la enfermedad y la calidad de vida de quienes la sufren ya que mientras más tiempo pasa, más probabilidades se tiene de desarrollar otros males autoinmunes, además de que la persona sigue sufriendo de diarrea crónica, baja de peso, alteraciones nutricionales, anemia y déficit de calcio, puntualiza Albornoz.

Dieta: único tratamiento

El único tratamiento existente hasta ahora, es una dieta libre de gluten para toda la vida, con el objeto de recuperar la mucosa intestinal y sus efectos. Esto implica eliminar por completo el consumo de alimentos que contengan esta proteína y adoptar un nuevo estilo de vida. Para ello, es necesario leer las etiquetas nutricionales.

"De preferencia, también se recomienda consumir alimentos elaborados principalmente en el hogar, ya que mermeladas y cecinas también pueden contener trazas de gluten", explica la especialista de la clínica Santa María. También ha ayudado en que en el último tiempo exista en el mercado productos horneados a base de harina de arroz, maíz o papa, que no provocan daños. "Se puede creer que consumir pequeñas cantidades de gluten no causa daño a nivel inmunológico. Pero esa cantidad hoy, más la de mañana y las siguientes perjudican y cada vez será mas difícil revertir el daño", dice Santibáñez.