Ali Akbar Velayati,
© ReutersIrán acusó a Francia de tener una "visión partidista y sesgada" del conflicto en el Oriente Medio
Ali Akbar Velayati, asesor del líder supremo, Ali Jameneí aseguró este sábado que el presidente francés, Emmanuel Macron, "no tiene derecho a interferir".

Velayati Advirtió que si Francia quiere tener buenas relaciones con Irán "debe abstenerse de inmiscuirse en estos asuntos".

Macron, pidió el viernes que Irán mantenga "una estrategia regional menos agresiva y aclare su política balística".

El asesor de Jameneí consideró que esas declaraciones injerencistas son "contraria a los intereses de Francia" por lo que le recomendó mantener una política "independiente".

"Nunca pedimos el permiso de otros en lo que respecta a nuestras cuestiones defensivas o sobre el alcance que deben tener nuestros misiles", señaló.

Además aseguró que no existe "ni siquiera un 1% de posibilidades" de que Irán negocie sobre estos temas internos de defensa y estratégicos con Francia.

Por su parte, el presidente francés Emmanuel Macron se mostró dispuesto a "dialogar" con el Gobierno iraní.

"El papel de Francia es construir la paz, no inmiscuirse en ninguna de las divisiones nacionales ni regionales o elegir un campo contra otro, mientras muchos querrían llevar a las potencias occidentales a una oposición creciente entre chiíes y suníes", agregó Macron.


Comentario: Hasta que los hechos demuestren que el presidente Macron dice la verdad, no es de sorprender que Irán reaccione así. Francia no siempre ha cumplido el papel de "construir la paz", y mucho menos sin inmiscuirse en divisiones. Recordemos por ejemplo el caso de Libia:

El pasado jueves Irán acusó a Francia de tener una "visión partidista y sesgada" de la situación en Oriente Medio.