Traducido por el equipo de Sott.net

Un hombre de 70 años sufrió el sábado una "grave lesión en la pierna" en el suroeste de Francia tras un encuentro con un oso, según un comunicado de la prefectura suroccidental de Ariège.
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El cazador, que había estado persiguiendo jabalíes, fue asistido por el equipo de la gendarmería de alta montaña y trasladado rápidamente a un hospital local "en un estado preocupante", según el comunicado.

Un portavoz de la Gendarmería francesa no pudo confirmar a la CNN si el cazador disparó al oso, aunque en el comunicado de la prefectura de Ariège se leía que los gendarmes habían "localizado un cadáver de oso debajo del lugar donde se encontraba la víctima, lo que podría acreditar la tesis de un accidente relacionado con el encuentro entre el hombre y el animal".


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Desde entonces se ha desarrollado una investigación judicial para examinar las circunstancias del accidente.

El mayor carnívoro de Europa, el oso pardo, había estado a punto de desaparecer de Francia hasta que el gobierno francés inició un programa para reintroducirlo en las montañas de los Pirineos en 1996. Ese año, las autoridades francesas empezaron a importar osos de Eslovenia de la misma especie que los pirenaicos y a liberarlos en la cadena montañosa del suroeste.

Según un informe de la Red del Oso Pardo, dependiente de la Oficina Francesa de Biodiversidad, el año pasado había 64 osos pardos en los Pirineos, todos ellos descendientes de osos eslovenos reintroducidos a lo largo de los años.

Su presencia provoca crecientes tensiones con los ganaderos locales, por la amenaza que suponen para su ganado. El informe muestra que Ariège es el departamento francés que tiene el mayor número de osos, y donde se han medido más daños relacionados con ellos el año pasado, con 329 ataques relacionados con osos en 2020.