El vice primer ministro ruso, Alexandr Nóvak, ha señalado las principales causas de la crisis del gas en Europa.
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En una entrevista con el medio ruso RBC, Nóvak destaca el descenso de la producción de gas en Europa como una de las causas. Por ejemplo, desde 2013, el suministro de gas de los Países Bajos ha disminuido un 70%, mientras que la producción global de las empresas europeas ha caído un 22%.

Los campos antiguos están agotados y es necesario invertir en el desarrollo de nuevos, señala el vice primer ministro, quien antes de ser nombrado en este cargo por el presidente, Vladímir Putin, era el ministro de Energía de Rusia.

"En su mayoría, en Europa, se trata de yacimientos en alta mar, bastante caros, que requieren apoyo estatal y financiación barata. Pero, ¿qué estamos presenciando? Se recomienda a los bancos que no financien proyectos de hidrocarburos tradicionales, incluida la producción de petróleo y gas. Esto provocará más escasez en el mercado", advierte.

Según Nóvak, la Comisión Europea está abandonando "a propósito" los principios básicos — inversiones a largo plazo en el sector y contratos a largo plazo — en favor de los contratos al contado. Estos contratos implican la satisfacción de las ofertas a corto plazo, sin entender lo que ocurrirá en el mercado a medio y largo plazo.

También hay que tener en cuenta los riesgos de que se repita el frío invierno. "Los precios de los futuros con entrega exactamente en el primer trimestre [de 2022] ya están reaccionando, y se están estableciendo los riesgos de un invierno frío y de volúmenes insuficientes de gas, por lo que los precios están subiendo. Es una historia normal del mercado", concluyó el vice primer ministro.


Nóvak cree que Europa debería tener una previsión clara del balance de combustibles y energía y utilizarla para planificar los volúmenes de consumo y suministro a medio y largo plazo.

"Que haya spot y GNL, pero también debe haber contratos a largo plazo que garanticen el componente básico del suministro de gas a Europa", concluyó.