Esto contradice a la teoría según la cual el agua vino desde las partes más apartadas y frías del Sistema Solar

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El agua llegó a la Tierra desde el cinturón de asteroides situado entre las órbitas de Marte y Júpiter y no desde los cometas de lejanos rincones del Sistema Solar, según una reciente investigación publicada en la revista Science. Se cree que las primeras reservas de agua del Sistema Solar estaban concentradas en forma de hielo en asteroides y cometas. La Tierra, Marte y Venus se encuentran dentro del límite de la llamada 'línea de nieve', un área donde el vapor no puede convertirse en hielo por la proximidad del Sol. Por eso los planetas situados cerca del Sol primero eran secos y posteriormente el agua llegó a estos cuerpos celestes en meteoritos y fragmentos de cometas provenientes, según se cree, de zonas lejanas del Sistema Solar.

Para establecer con más precisión el origen de estos cuerpos celestes que trajeron consigo el agua, un grupo de astrofísicos del Instituto de Ciencias de Carnegie en Washington analizaron la composición isotópica de las moléculas de agua de 85 fragmentos de condritos carbonáceos, unos meteoritos que aparecieron tras la caída a la Tierra de los asteroides más antiguos del Sistema Solar.

Los científicos intentaron determinar el origen del agua terrestre a partir de la cantidad de deuterio, isótopo pesado de hidrógeno, en los condritos. Luego compararon la cantidad de deuterios en condritos, con el mismo índice del agua terrestre y del hielo de los cometas.

Los astrofísicos eligieron este método porque la cantidad del isótopo pesado de hidrógeno en las moléculas del agua dentro de estos meteoritos depende de las condiciones en las que se ha formado el cuerpo celeste. Cuanto más lejos del Sol haya 'nacido' un asteroide o un cometa, más átomos de deuterio contendrá, afirman los investigadores.

Los resultados del análisis mostraron que la concentración de deuterio en los condritos era bastante baja y equivalía aproximadamente al nivel de concentración de los isótopos pesados de hidrógeno en los océanos terrestres. Esta concentración era mucho menor que en los asteroides y cometas que provienen de la parte fría del Sistema Solar.

Según las conclusiones de los astrofísicos, los condritos con las características más aproximadas a las terrestres se formaron en la parte interior del Sistema Solar y no fuera de la órbita de Júpiter. Asimismo, los condritos que se formaron en esta parte del Sistema Solar contienen las cantidades terrestres de isótopos de elementos químicos tales como el oxígeno y el nitrógeno.

Los resultados de la investigación hacen suponer que la mayor parte del agua en nuestro planeta proviene de los condritos del cinturón de asteroides y no de cometas de partes remotas del Sistema Solar.

Los científicos señalan que esta conclusión contradice a la mayoría de las teorías aceptadas sobre la formación de la Tierra y otros planetas, pero que aún se necesitan otras investigaciones para corroborarla por completo.