Como si se tratara de robots creados por el hombre, estas especies terrestres y marinas provocan sorpresa, curiosidad y asombro. Su capacidad de aluzar las profundidades marinas, un neblinoso bosque o una recóndita cueva, es sinónimo de complejos procesos bioquímicos que los humanos, simplemente, no comprendemos en su totalidad.
especies bioluminiscentes1
© Desconocido
Este escorpión llama la atención no sólo por su color, sino por su capacidad de iluminarse siendo un arácnido.
especies bioluminiscentes2
© Desconocido
Grupo de larvas en cuevas de Nueva Zelanda.
especies bioluminiscentes3
© Desconocido
En ocasiones, la perfección es tan evidente que las imágenes oscilan entre lo real y lo irreal.

especies bioluminiscentes4
© Desconocido
Las profundidades marinas son testigo del espectáculo que los calamares ofrecen.
especies bioluminiscentes5
© Desconocido
Las medusas bioluminiscentes pueden asemejar artefactos creados por el hombre
especies bioluminiscentes6
© Desconocido
La medusa bioluminiscente multiplica su belleza al encenderse
especies bioluminiscentes7
© Desconocido
Bacterias bioluminescentes en reproducción
especies bioluminiscentes8
© Desconocido
Hongo Fluorescente
especies bioluminiscentes9
© Desconocido
Colonias de bacterias bioluminiscentes
especies bioluminiscentes10
© Desconocido
Grupo de larvas en las cuevas de Waitomo