Protesta masiva en Varsovia
© EFEProtesta realizada bajo el lema 'Despierta Polonia' en Varsovia
Miles de personas, 50.000 según lo organizadores, se manifestaron el sábado en Varsovia para protestar contra las reformas económicas emprendidas por el Gobierno, entre ellas la de elevar la edad de jubilación hasta los 67 años, y frente a las "políticas contra los católicos", que dicen sentirse discriminados.

La protesta, bajo el lema "Despierta, Polonia", fue convocada por el sindicato Solidaridad y por el principal partido de la oposición, Ley y Justicia, la formación nacionalista-conservadora liderada por Jaroslaw Kaczynski.

En la marcha antigubernamental se vieron miles de banderas nacionales polacas junto con símbolos católicos y pancartas, donde se denunciaba desde el supuesto "ultraliberalismo perverso" del primer ministro, Donald Tusk, hasta el "anticatolicismo" del Ejecutivo polaco.

Muchos de los congregados, menos de 20.000 según la policía local, mostraban su indignación con el paquete de medidas de austeridad y reformas diseñado por el Gobierno para garantizar la estabilidad financiera, que afectará especialmente a las pensiones y a la edad de jubilación.

La edad de jubilación aumentará hasta los 67 años, pasando de los actuales 60 años para las mujeres y 65 para los hombres, con edades incluso inferiores en el caso de grupos profesionales considerados de riesgo, como el de los mineros.

"Es intolerable, este Gobierno sólo piensa en los ricos y se olvida de los trabajadores", explicó a Efe Mariusz Sokolowski, empleado de los ferrocarriles polacos.

Muchos de los manifestantes eran conservadores católicos, quienes no dudaron en denunciar las políticas del Ejecutivo liberal de Donald Tusk contra la iglesia Católica.

"Discriminan a los católicos porque desean que Polonia sea un país cada vez más secular, donde la gente se olvide de Dios y sólo piense en el dinero", dijo a Efe una de las personas congregadas en esta manifestación, María Kowalska.

La protesta se desarrolló sin incidentes significativos, entre gritos contra el Gobierno, himnos religiosos y canciones patrióticas.