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Varios miles de estudiantes de la Universidad de Nangarhar, situada en las afueras de Yalalabad, han participado en la manifestación en la que han expresado su odio al régimen de Tel Aviv y sus aliados por abusar de los derechos de los palestinos.
Los manifestantes han quemado banderas del régimen israelí y de EE.UU., al tiempo que han gritado fuertemente lemas como "abajo el régimen de Israel" y "abajo Estados Unidos".
Los presentes en la protesta, mientras se dirigían hacia la frontera con Paquistán, han condenado el reciente bombardeo de la artillería paquistaní contra el territorio afgano. Además han bloqueado una carretera que conducía al centro de la ciudad.
Desde el 14 de noviembre y durante ocho días consecutivos, más de 140 palestinos, entre ellos niños y mujeres, han perdido la vida y más de 1.100 han resultado heridos como consecuencia de las ofensivas israelíes contra los palestinos en Gaza.
La indignación del pueblo afgano aumenta cada día en concordancia con el incremento de la violencia en contra de los musulmanes en distintas partes del mundo; no más lejos, Afganistán mismo es un ejemplo de inestabilidad y violencia por la presencia de la fuerza militar estadounidense y sus aliados.
La misma jornada, la explosión de una bicicleta bomba en un mercado local en la provincia de Khost, en el este de Afganistán, se ha saldado con dos muertos y al menos 18 heridos.
Los heridos han sido trasladados a un hospital cercano, algunos de los cuales se encuentran en estado de salud crítico.
Ningún grupo ha reivindicado la responsabilidad del atentado, pero las autoridades suelen culpar a los taliban por estos ataques.
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