Las manifestaciones en México no detuvieron el cambio de poderes.
  • Manifestantes lanzan petardos y tratan de derribar vallas metálicas
  • Peña Nieto, el político que hizo realidad el sueño del PRI
Un grupo de manifestantes lanzó petardos y ha intentado romper el cerco de las vallas metálicas, colocado en la zona de San Lázaro para resguardar la Cámara de Diputados, donde tuvo lugar la ceremonia de toma de posesión de Enrique Peña Nieto como presidente de México.

Sobre la avenida Eduardo Molina y Zaragoza, los manifestantes que se identifican como miembros del movimiento #Yosoy132 confrontaron a los elementos de la Policía Federal, a quienes lanzaron varias de las llamadas bombas molotov, informa Notimex.


Comentario: Es interesante que estos enfrentamientos sean adjudicados a #Yosoy132, un movimiento que nunca se caracterizó por la violencia, y que se deslindó de los actos vandálicos. ¿Podría tratarse una vez más de agentes provocadores para manchar la imagen de movimientos con justo descontento? ¿O es que el descontento ha alcanzado un nuevo nivel?


Con agua y extintores fue controlado el fuego momentáneo que generaron, y al parecer los agentes de seguridad contestaron con gases lacrimógenos.

¿Heridos de gravedad?

Medios como la versión digital de Publimetro sostienen que hay tres personas heridas; existe confusión por lo que provocó las lesiones pero corren versiones sobre un herido de gravedad en la cabeza.

La versión digital del periódico mexicano Reforma aseveró que el gas lacrimógeno lanzado por Policías Federales afectó a legisladores al interior del recinto, que sufrieron de ardor de ojos y nariz.

En tanto, la televisora Milenio detalló que al menos tres enfrentamientos se han suscitado en el área aledaña entre los manifestantes y policías federales.

Por su parte, el radiofónico Panorama Informativo asegura que dentro de los inconformes se encuentran también miembros de otras organizaciones políticas.

Autoridades de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSPDF) informaron que siete personas resultaron lesionadas cuando un grupo de inconformes secuestró un camión de basura y lo estrelló contra vallas metálicas en las inmediaciones de San Lázaro, informa Notimex.

De acuerdo con el reporte del puesto de mando, los hechos ocurrieron en la esquina de Eduardo Molina y Zapata, frente al Palacio Legislativo de San Lázaro, sin precisar mayores datos de los lesionados.

Detalló que además los manifestantes prendieron fuego a los desperdicios que transportaba la unidad, arrancaron dos casetas telefónicas y el adoquín, que arrojaron contra los elementos federales provocando la intervención del cuerpo de granaderos.


En su mayoría jóvenes, los manifestantes protestan por lo que ellos llaman "imposición" del ahora presidente Enrique Peña Nieto.

Por su parte, AP reporta también los enfrentamientos en las cercanías de las instalaciones del Congreso.

Cientos de personas, algunas con el rostro cubierto, derribaron algunas de las vallas metálicas colocadas en el perímetro alrededor de la Cámara de Diputados e incluso lanzaron bombas molotov y petardos de fabricación casera hacia donde elementos de la policía federal se encontraban en resguardo.

En respuesta, policías federales lanzaron gas lacrimógeno hacia los manifestantes.


Un policía herido

Un periodista de The Associated Press vio al menos a un policía herido con el rostro ensangrentado que era trasladado por sus compañeros hacia una ambulancia.

Peña Nieto recibió del presidente saliente Felipe Calderón la banda presidencial que marca formalmente el cambio de poderes en el país, aunque en los primeros minutos del sábado se dio una ceremonia privada en la que el nuevo mandatario recibió el mando del Poder Ejecutivo.

El PRI, que dirigió a México durante siete décadas, regresa al poder con un presidente de una nueva generación para gobernar a un país que ha cambiado considerablemente en los 12 años en que el partido no ejerció la presidencia.

Enrique Peña Nieto juramentó al cargo después de hacer campaña como el rostro de un nuevo Partido Revolucionario Institucional, que se ha declarado arrepentido y renovado tras ser sacado de la presidencia en las elecciones de 2000. El PRI gobernó durante 71 años con una amalgama de dádivas populistas, sobornos y elecciones manipuladas.

Peña Nieto ha prometido gobernar democráticamente y en forma transparente. Pero sus primeras disposiciones, incluso antes de la toma de posesión, evidenciaron un sólido vínculo con el pasado.


Cinco mil uniformados resguardan la seguridad

Por otro lado, Notimex informa que más de cinco mil policías capitalinos vigilan los actos con motivo de la toma de protesta de Enrique Peña Nieto como presidente de México, para garantizar el orden público y controlar las vías de acceso a las inmediaciones de la Cámara de Diputados, el Palacio Nacional y el Campo Marte.

En un reporte de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSPDF) se establece que vigilarán los desplazamientos de la comitiva presidencial que abarcan Viaducto Miguel Alemán, Congreso de la Unión, Paseo de la Reforma, Fray Servando Teresa de Mier y avenida Chapultepec.

Debido a la concentración de manifestantes en el Ángel de la Independencia y el Monumento a la Revolución, entre otros puntos, se desplegaron elementos de las policías de Proximidad, Metropolitana y de Control de Tránsito para garantizar el orden y el control vial, así como el resguardo de los monumentos.

El dispositivo de seguridad brindará facilidades a senadores, diputados e invitado especiales para que ingresen por el Eje 2 Oriente, Congreso de la Unión, Eje 3 Oriente y Sidar y Rovirosa.


Asimismo dos helicópteros del Agrupamiento Cóndores realizarán sobrevuelos en las zonas de operación, para coadyuvar con las acciones que se realizan en tierra.

El Estado Mayor Presidencial ha instalado seguridad con vallas metálicas de alta contención en todo el perímetro de San Lázaro y ha requerido mil 400 agentes de la Policía Metropolitana para cubrir ocho sectores del envallado metálico que rodea al Palacio Legislativo.

En el Centro Histórico también se instalaron vallas en los alrededores de Palacio Nacional como son 20 de Noviembre, Venustiano Carranza, Coreo Mayor, 5 de Febrero, Pino Suárez, así como en los alrededores de Circuito Plaza de la Constitución.

Por otro lado, el Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro informó que el sábado permanecerán cerradas las estaciones Zócalo de la Línea 2 del Metro, así como Candelaria y Fray Servando, de la Línea 4, por la toma de protesta de Peña Nieto como presidente de México.

Mediante su cuenta en Twitter @STCMetroDF, resaltó que el cierre de esas tres estaciones será de las 07:00 horas hasta que finalicen los actos protocolarios federales que tendrán lugar en el Palacio Legislativo de San Lázaro y en Palacio Nacional.

El Metro recordó finalmente a los usuarios que el horario de servicio para este sábado será el establecido para domingos y días festivos, de 07:00 de la mañana a 24:00 horas.

Peña Nieto, el político que hizo realidad el sueño del PRI

Enrique Peña Nieto, el político que hizo realidad el regreso del Partido Revolucionario Institucional (PRI) al poder, apuesta por transformar México con una Presidencia moderna y cercana a los ciudadanos, alejada de los vicios del pasado.

Este abogado de 46 años, militante del PRI desde los 18 años, prometió un cambio profundo en México, relanzar su "posición estratégica en el mundo" y alentar la reconciliación nacional y la unidad para hacer frente a los desafíos del país.

Los retos más importantes: restablecer la paz y la seguridad, combatir la corrupción a través de un organismo dedicado a esa tarea y generar empleo e impulsar el desarrollo económico para buscar bienestar en las familias.

Prometió una Presidencia moderna, responsable y abierta a la crítica y no defraudar a los mexicanos en esta segunda oportunidad para el PRI, que ostentó el poder desde 1929 hasta el 2000, cuando lo perdió frente al conservador Partido Acción Nacional (PAN).

Sin embargo, para el analista Carlos Elizondo, el estilo que impondrá Peña Nieto en Los Pinos aún es una "incógnita" porque "nunca ha tenido un cargo en el Gobierno federal".

Aunque gobernó de 2005 a 2011 el central Estado de México, "por muy importante" que éste sea, los problemas y los actores que ahora va a afrontar son "muy distintos" a los que ha lidiado a lo largo de su carrera, dijo a Efe el académico del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE).

Por un lado, afronta condiciones macroeconómicas favorables y expectativas de crecimiento buenas en un contexto global difícil, pero en materia de seguridad tiene su mayor desafío, dado que los índices de violencia están en niveles muy altos.

Sin embargo, añadió, "parece que el ciclo de violencia va a la baja", lo que le permite un inicio "cómodo" en el que deberá mostrar resultados pronto en esa materia y en torno a las reformas de gran calado que ha prometido, para lo cual deberá negociar porque no tiene el control de las cámaras.

Pacto nacional

El equipo de Peña Nieto impulsa un pacto nacional con otras formaciones políticas sobre los temas más importantes del país, que no ha logrado cerrar antes del inicio del mandato por las reticencias de sectores del izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD).

Tampoco pudo sacar adelante la reforma de la estructura de Gobierno, a fin de eliminar dos carteras, entre ellas la de Seguridad Pública, que sería absorbida por la Secretaría de Gobernación.

Peña Nieto deberá demostrar a partir de hoy que no es un presidente "impuesto" y "prefabricado" por la cadena Televisa, como sostienen sus críticos, entre ellos el ex candidato de la izquierda, Andrés Manuel López Obrador, que no ha reconicodo su triunfo.

Y es que apenas en 2005, cuando fue designado candidato a gobernador del Estado de México, era un gran desconocido, a pesar de que ya había tenido varios cargos en la administración pública, aunque solo a nivel estatal.

En esa campaña "la estrategia fue vender a un 'rockstar': apuesto, joven, alegre, cálido, con muy buenas formas", recuerda uno de los que intervino en ella, Liébano Sáenz, citado por la revista Nexos.

Siempre bien peinado y con su flequillo alzado característico, comenzó en esa época a firmar documentos ante notario en los que plasmaba sus promesas políticas, una estrategia que repitió centenares de veces en la campaña presidencial.

Su mentor político en esa primera etapa fue Arturo Montiel, un tío lejano y gobernador del Estado de México de 1999 a 2005, cuya gestión estuvo marcada por denuncias de corrupción.

En 2000 se convirtió en secretario de Administración del Gobierno del Estado de México, en 2003 fue elegido diputado por el distrito de Atlacomulco, su cuna, y el 15 de septiembre de 2005 se convirtió en gobernador de esa región.

En un perfil publicado en el libro "Los suspirantes", el periodista Ignacio Rodríguez Reyna describe a Peña Nieto como un "político rígido, poco hábil para improvisar, debatir"; lo suyo es seguir el guión en "escenarios preparados y controlados", añade.

Cuando quedó en evidencia

En diciembre de 2011 quedó en evidencia en la Feria Internacional del Libro (FIL), cuando un periodista le pidió que mencionara las obras que más le habían impactado en su vida, y sólo pudo recordar la Biblia.

Ese desliz desató una oleada de burlas sobre su preparación, a pesar de contar con una licenciatura en Derecho y una maestría en Administración de Empresas.

En plena campaña debió hacer frente al movimiento Yo soy 132, que surgió después de que estudiantes le cuestionaran la represión policial de un alzamiento civil en mayo de 2006 en el Estado de México que acabó con dos muertos, el arresto de 200 activistas y abusos sexuales de una veintena de mujeres.

Personas del entorno del PRI calificaron de acarreados e infiltrados a los jóvenes, pero estos defendieron su derecho a la crítica y ganaron respaldo en las redes sociales, y surgió así un movimiento que tuvo voz propia en la campaña y dialogó con los candidatos, excepto con Peña Nieto.

Según Rodríguez Reyna, las mujeres jugaron "un papel crucial en la construcción de su candidatura presidencial", a pesar de su polémica vida privada.

Durante la campaña se ventiló que Peña Nieto, casado en 2010 en segundas nupcias con la actriz Angélica Rivera, tuvo hijos fuera de su primer matrimonio con Mónica Pretelini, que falleció en 2007.

"De ninguna manera (soy un seductor), me asumo como un hombre de familia, dedicado a mi familia", sostiene este político que deberá conciliar esa imagen con la de un estadista que promueve los acuerdos para transformar México.