homicidios en Chicago
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La cifra de homicidios ocurridos en la ciudad estadounidense de Chicago, en el estado de Illinois, ha alcanzado los 500 casos en el cierre del año 2012.

El mencionado dato, es superior a los 414 casos registrados en Nueva York, segunda aglomeración urbana del continente, que tiene tres veces más habitantes que Chicago, lo que pone de manifiesto la brutalidad y la inseguridad callejera en la tercera ciudad más poblada del país.

Aunque las autoridades norteamericanas aseguran que están poniendo todo su esfuerzo para disminuir la violencia en un país que se considera como el principal "patrocinador de paz en el mundo", el número de ciudadanos asesinados con armas de fuego no hace más que incrementarse.

En el año 2008, las estadísticas de homicidios violentos alcanzaron los 512 casos; mientras que en 2011 la cifra se ubicó en 435.

Estas cifras oficiales fueron dadas a conocer el viernes por el jefe de la Policía de Chicago, Garry McCarthy, quién echó la culpa a la abundancia de armas de fuego ilegales en algunos barrios de esta ciudad, lo que da lugar al incremento de balaceras protagonizadas por las pandillas.

Tras la publicación de estas cifras, muchos residentes de la ciudad se sorprendieron, al mismo tiempo que mostraron su preocupación e inseguridad ante tanta violencia callejera.

En las últimas semanas, se han producido varios tiroteos mortales en EE.UU., poniendo el tema de la laxitud de las leyes de control de armas de nuevo en el punto de mira.

En este sentido, más de 100 mil estadounidenses han firmado una petición en la página Web de la Casa Blanca, afirmando que "Nosotros el pueblo" pedimos al Gobierno del presidente, Barack Obama, un nuevo debate nacional sobre el control de armas.